El arma del futuro es un rayo de calor que no mata

Una intensa sensación de quemazón. Como si una potente y gigante bombilla fuera presionada fuertemente contra la piel. Más o menos, este es el efecto descrito de la nueva arma que Estados Unidos probó el miércoles en su base aérea de Moody, en Georgia, y que se conoce con el nombre de Active Denial System (ADS). Su uso está especialmente indicado para disolver grandes concentraciones de gente y no provoca la muerte. Su funcionamiento es sencillo: envía radiación electromagnética a objetos situados hasta a un kilómetro de distancia. Las ondas, que penetran en la ropa pero no en las paredes, agitan las moléculas de la epidermis hasta los 55 grados centígrados causando una súbita subida de temperatura y provocan-do una dolorosa sensación de quemazón. Según señala un portavoz del laboratorio de las Fuer-zas Armadas estadounidenses encargado del proyecto, «durante el primer milisegundo sólo sientes un poco de calor, pero poco a poco se va calentando y parece que estés ardiendo. Tan pronto como te alejes, la piel vuelve a su temperatura normal y ya no duele». Algunos periodistas que «decidieron prestarse como conejillos de indias» señalaron tras la experiencia que era como estar dentro de un horno. Hasta el momento, la única versión del ADS es una especie de vehículo en el que va instalado, pero el Ejército ya trabaja en modelos más pequeños y portátiles que podrían estar listo en un plazo de entre uno y tres años.