Crece la competencia internacional por extraer crudo del subsuelo libio

Después de pasar veinte años marginada, Libia ve como afluyen todas la compañías petroleras ávidas de crudo, que se enfrentan en unas pujas cada vez más tensas. «Esto es como la quimera del oro negro. Nosotros lo organizamos como unos juegos olímpicos, y que gane el mejor...», afirmó Chokri Ghanem, presidente de la compañía nacional del petróleo, la NOC. Con el final de las sanciones de la ONU, en 2003, y el giro diplomático iniciado por Muammar el Gadafi, que manda en Libia desde hace 37 años, las perforaciones se han reanudado frenéticamente en tierra y mar. Libia, la segunda productora africana, con 1,6 millones de barriles diarios, tiene unas reservas de un petróleo de alta calidad evaluadas hoy en día en 42.000 millones de barriles, y que podrían llegar a los 100.000, millones, como Kuwait. «Libia es uno de los contados países que disponen de inmensas zonas de exploración casi vírgenes, y algunos se lanzan en ellas con criterios de rentabilidad económica muy débiles», señala Philippe Malzac, patrón en Libia de la francesa Total, una de las principales aspirantes a hacerse con buena parte de este negocio. Ghanem, ex primer ministro y considerado líder de los «reformistas», acaba de cerrar la tercera ronda de convocatorias internacionales para la atribución de derechos de exploración del subsuelo. Retorno estadounidense Por primera vez en 40 años, petroleras extranjeras habían ganado licitaciones en 2005, con el retorno -simbólico por su origen pero fuerte por su presencia económica- de las firmas estadounidenses Occidental Petroleum y Chevron Texaco. En la segunda ronda, el éxito fue parecido pero se impusieron las compañías asiáticas, 10 de 19 sociedades ganadoras, además de la francesa Total. Al término de las tres pujas, en diciembre pasado, Ghanem estima «que en dos años, más de 40 compañías de todo el mundo han recibido estos permisos» de cinco años de exploración, seguidos de otros 20-25 años de explotación en caso de descubrimiento. «Estados Unidos, Gran Bretaña, Italia, Francia, Rusia, China, Taiwán, India, Argelia, Indonesia, España o Canadá...», enumera como si se tratara de un palmarés, seguro de que se le olvidan países. Para él, lo importante es también que al filo de las pujas las compañías hayan bajado cada vez más la parte de producción que se supone les toca, y aumente la parte de la NOC. Libia, donde el petróleo representa ya el 95% de las exportaciones (cerca del 40% a Italia) y el 70% de su producto nacional bruto, quiere recuperar de aquí a 2013 su capacidad productiva anterior al embargo.