En el fallo ha primado el derecho a la libertad de expresión y que no hubo voluntad de ofensa
Absuelta la revista gala que publicó unas viñetas satíricas sobre Mahoma
El rector de la Mezquita de París admite el fallo, que será apelado por grupos islámicos
La justicia francesa absolvió ayer al director del semanario satírico Charlie Hebdo del delito de injurias religiosas del que lo acusaban dos organizaciones musulmanas por la publicación de tres caricaturas de Mahoma. La sentencia del Tribunal Correccional de París antepone el derecho a la libertad de expresión y considera que los dibujos no atacan al islam sino a los integristas. El tribunal de París sí admite que el dibujo de la bomba es «chocante e hiriente para los musulmanes», pero que «no hubo voluntad deliberada» de ofender y que se incluía en un número especial de una revista satírica no dirigida específicamente a los musulmanes. Cuando esta publicación se convirtió en un éxito de ventas en febrero del 2006, los integristas ya se habían lanzado a la calle. La sentencia fue recibida con aplausos del público y un enorme alivio del responsable del semanario, Philippe Val. «Es una muy buena noticia para los musulmanes laicos y republicanos, y para la libertad de expresión», aseguró. El rector de la Mezquita de París y presidente del Consejo Francés del Culto Musulmán, Dalil Boubakeur, no apelará la sentencia. Su abogado la considera «equilibrada», porque «admite el derecho a la caricatura y a la queja de quienes se sienten ofendidos». Discrepancias En cambio, los portavoces de la Unión de Organizaciones Islámicas de Francia discrepan y sí la recurrirán, porque no comprenden que el tribunal admita que una de las viñetas es ofensiva y la justifique con la libertad de expresión. El fiscal había pedido la absolución de Val, quien arriesgaba seis meses de prisión y 22.500 euros de multa, por «injuria pública hacia un grupo de personas en razón de su pertenencia a una religión». El juicio unió en una piña a los políticos. El socialista François Hollande y el centrista François Bayrou declararon como testi-gos de la defensa, que también aportó una carta de apoyo del también candidato presidencial Nicolas Sarkozy, ministro de Culto además de Interior, y muchas veces caricaturizado por la publicación.