Merkel llama a superar la crisis dela UE con motivo del 50cumpleaños

Los líderes de la Unión Europea abrieron ayer los festejos del 50 aniversario del fundacional Tratado de Roma, que ten-drán su punto culminante hoy con la Declaración de Berlín en la que los miembros se comprometerán a sacar al bloque de su crisis en el año 2009. Antes de escuchar a la Filar-mónica de Berlín, que abrió los actos conmemorativos, la canciller alemana y presidenta de turno de la Unión Europea, Angela Merkel, llamó a sus colegas a hacer un esfuerzo conjunto que conduzca al fin de la crisis constitucional europea y haga que la UE gane decisivamente en capacidad de maniobra. Merkel dijo que si bien en el seno de la UE se tomaban en serio las reservas que tienen algunos miembros con un nuevo tratado, como Holanda, Polonia, la República Checa y Gran Bretaña, a más tardar en el 2009 tendrá que estar lista la nueva estructura comunitaria, que en el lenguaje burocrático de la UE se describe como «la renovada base conjunta de la Unión Europea». La canciller está cumpliendo metódicamente su propósito de sacar a la UE de la crisis. La Declaración que será hoy solemnemente pronunciada en Berlín constituye un paso más en la agenda que se ha marcado. El siguiente lo tiene previsto para junio, cuando la UE celebre la cumbre con la que concluye la presidencia alemana. Será entonces cuando Merkel intentará poner en marcha una nueva Conferencia Intergubernamental (CIG), o al menos su calendario, a la que se encomendaría el trabajo de poner a punto un nuevo texto que retomara los aspectos más relevantes del fallido Tratado constitucional. La CIG negociaría durante todo el segundo semestre, bajo presidencia portuguesa, buscando un acuerdo sobre el nuevo Tratado que debería sus-tanciarse, a más tardar, el próxi-mo diciembre. Todo el 2008 estaría consagrado al proceso de ratificación del documento en los países miembros, de manera que la nueva montura jurídica de la Unión estaría lista para el 2009, antes de las elecciones al Parlamento Europeo. Concierto En su calidad de anfitriona, Merkel, muy sonriente y ataviada con traje sastre, recibió a sus huéspedes en el moderno complejo de la Filarmónica ,en donde al son de la Quinta Sinfonía de Beethoven se dio inicio a los actos de celebración. Después los invitados asistieron a una cena de gala ofrecida por el presidente alemán, Horst Kohler, en el palacio Bellevue.