Bangladesh responde a las revueltas cerrando las oficinas públicas
Los incidentes han incluido aparatos incendiarios en autobuses
El Gobierno de Bangladesh ordenó ayer el cierre de las oficinas públicas en la capital, Dacca, y las principales ciudades del país, donde se mantiene el toque de queda impuesto ayer tras las protestas estudiantiles en las que una persona resultó muerta y otras 300 heridas. Del toque de queda están exentos los periódicos, agencias de prensa, radios y televisiones, según una fuente oficial citada por la agencia bangladeshí UNB. La medida se impuso para contener la revuelta que comenzó el lunes en la Universidad de Dacca y se extendió de allí a otras ciudades, donde cientos de personas se enfrentaron a las fuerzas del orden y reclamaron el fin del estado de excepción que rige en Bangladesh desde enero pasado. Ante esa situación, el Gobierno, por primera vez desde que el restablecimiento de la democracia, hace dieciséis años, decretó el cierre de todas las universidades e institutos en las ciudades y ordenó a los estudiantes que las evacuaran antes de la caída de la noche. Además, bloqueó todos los operadores de telefonía móvil del país, lo que impidió la comunicación por móvil hasta que las líneas fueron restablecidas ayer. Pese al toque de queda, por las calles de Dacca se podían ver algunos estudiantes y empleados acudiendo a sus lugares de trabajo sin que intervinieran las fuerzas del orden. Las protestas de esta semana son el primer desafío al Gobierno provisional que dirige Fakhruddin Ahmed, que el pasado enero declaró el estado de excepción para atajar una ola de violencia política y pospuso las elecciones.