Dieciséis muertos en el accidente de un avión de carga en el Congo

Dieciséis personas murieron al estrellarse, en el este de la República Democrática del Congo, un avión de carga con pasajeros a bordo, informó ayer la Dirección de Aviación Civil Congoleña. El único superviviente es un niño de tres años que fue trasladado al Hospital General de Kongolo, según el comunicado difundido por el organismo gubernamental. De las víctimas mortales, cuatro eran tripulantes y los otros 12 eran pasajeros que murieron calcinados al quedar atrapados en el avión, que se incendió tras la colisión. El accidente tuvo lugar el domingo en Kongolo, a unos 650 kilómetros de Lubumbashi, capital de la provincia sudoriental de Katanga. El incidente se produjo cuando, tras registrar problemas en el motor, el piloto dio media vuelta antes de precipitarse cerca de la pista del aeropuerto de donde había despegado. El aparato, un Antonov fletado por la compañía privada Agfretco , transportaba nueve toneladas de casiterita -mineral de estaño- hacia Goma, capital de la provincia Kivu Norte y fronteriza con la vecina Ruanda. Goma es uno de los principales puertos de salida de los minerales del este del Congo, ya que los comerciantes ruandeses son unos de los mayores compradores de sus materias primas. Récord en inseguridad El aparato, destinado al transporte de mercancías, llevaba también pasajeros, una práctica habitual en esta región del país, donde la falta de infraestructuras obliga a los civiles a buscar alternativas poco seguras para desplazarse a larga distancia. Los accidentes aéreos son frecuentes en el Congo, que posee el récord mundial de compañías poco seguras por la Unión Europea, que recomienda no viajar en más de 50 compañías aéreas.