Chávez llega a Colombia para negociar con las FARC la liberación de rehenes

El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, llegó ayer a Bogotá para reunirse con su homólogo de Colombia, Álvaro Uribe, con objeto de contribuir a que avance un acuerdo humanitario que pueda liberar a los secuestrados por la guerrilla de las FARC. El avión de Chávez aterrizó en la zona militar del aeropuerto de Bogotá, donde fue recibido por el ministro colombiano de Relaciones Exteriores, Fernando Araújo. En breves declaraciones a pie de pista tras recibir los honores de rigor, Chávez afirmó que llegó a Colombia «con la fe y el optimismo más grande» con el objetivo de «poder contribuir, pido a Dios, en el canje humanitario y en la paz en Colombia». El presidente venezolano, vestido de manera informal con su habitual camisa roja abierta y acompañado por su ministro de Exteriores, Nicolás Maduro, se mostró «muy feliz, como siempre», de viajar a Colombia, un país que «quiero tanto», dijo. Chávez, que no admitió preguntas y se remitió a la conferencia de prensa que ofrecerá con Uribe tras su reunión, se trasladó con su comitiva a la hacienda presidencial de Hato Grande, en la afueras de la capital colombiana. A la primera de dos reuniones previstas entre los jefes de Estado de Colombia y Venezuela asisten sus respectivos ministros de Exteriores, Fernando Araújo y Nicolás Maduro, así como la senadora colombiana Piedad Córdoba, y el Alto Comisionado para La Paz del Gobierno colombiano, Luis Carlos Restrepo. Córdoba actúa como gestora para lograr un acuerdo humanitario que permita la liberación de los 45 secuestrados que tienen las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en calidad de «canjeables» por medio centenar de guerrilleros presos en cárceles colombianas. Dentro del grupo están la ex candidata presidencial Ingrid Betrancourt, quién tiene además nacionalidad francesa y de la que no se tienen pruebas de supervivencia desde hace tres años, y los ciudadanos estadounidenses Thomas Howe, Marc Gonsalves y Keith Stannsen, así como militares y políticos. La agenda de diálogos entre los presidentes incluye además asuntos relativos a la integración y el comercio entre los dos estados. La legisladora, del opositor Partido Liberal, invitó a Chávez a hacer de intermediario entre el Ejecutivo colombiano y los rebeldes, quienes pretenden intercambiar a 45 personas cautivas por medio millar de rebeldes presos, aunque aún no se sabe si Chávez trae alguna respuesta de las FARC a su petición pública de que se pusieran en contacto con él. Córdoba tampoco descartó que el presidente venezolano se reúna con familiares de guerrilleros de las FARC presos, entrevistas que tendrán lugar en la embajada de Venezuela, en un programa al margen del oficial. La senadora, por otra parte, declaró ayer a la prensa que el proceso en favor de los secuestrados por la guerrilla de las FARC ha tenido un «inicio esperanzador» con la vinculación del polémico presidente venezolano.