Como contrapartida Venezuela se compromete a regresar a la Comunidad Andina de Naciones | Crónica | Canje de prisioneros |
Uribe aprueba que Chávez negociecon las FARC la firma de unatreguaLos 41 guerrilleros indultadospor Venezuela son entregados
Tras ocho horas de negociaciones entre ambos gobiernos se cerró el acuerdo para dialogar por la paz Los ciudadanos colomb
El viaje del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, a Colombia fue mucho más largo, intenso y fructífero de lo previsto: el líder venezolano tiene luz verde de su homólogo colombiano Álvaro Uribe para negociar un acuerdo humanitario con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y mediar en el diálogo -actualmente en punto muerto- con el Ejército de Liberación Nacional (ELN). Como contrapartida, Venezuela regresaría a la Comunidad Andina de Naciones (CAN), que, a propuesta venezolana, se rediseñaría para que prime la función social frente a la comercial. La visita concluyó la pasada madruga con el acuerdo de que Chávez recibirá en los próximos días en Caracas a un representante de las FARC. «El Presidente Uribe ha visto con buenos ojos que yo reciba en Venezuela a un enviado de las Farc para hablar de este tema. Eso es imprescindible», dijo. El gobierno colombiano «en lugar de poner obstáculos a la reunión, seguramente va a facilitar que esa reunión se dé», señaló el ministro de Relaciones Exteriores colombiano y ex rehén de las FARC, Fernando Araujo. Añadió que era pronto para precisar «qué tipo de acciones se pueden dar para que se presente esa reunión», pero insistió en que existe «la voluntad» para que se realice. Embajada de Venezuela Al parecer, tendrá que intervenir la embajada de Venezuela en Bogotá, aunque los guerrilleros han demostrado en el pasado andar como pez en el agua por la selva que media entre los dos países.Ambos gobernantes estuvieron reunidos casi 8 horas. Ya en la noche ofrecieron una rueda de prensa conjunta donde se incidió en los pasos tendentes a lograr un acuerdo humanitario que deje en libertad a los 45 políticos, militares y estadounidenses «canjeables», a cambio de unos 500 guerrilleros presos.Uribe y Chávez difundieron una declaración en la que también mencionaron los acuerdos económicos como la inauguración el próximo 12 de octubre de la primera fase de un gasoducto. Chávez destacó su antigua disposición a ayudar porque «después de Colombia, nosotros somos quizá el país más afectado por estos conflictos de tanto tiempo». No obstante, alertó sobre la necesidad de ser prudentes y «avanzar con pie de plomo» porque han fracasado todos los muchos intentos previos. El gobernante no dio detalles sobre la respuesta de las FARC pero insistió: «Estoy optimista, estoy optimista, estoy optimista». Tampoco descartó que el delegado de las FARC pudiera ser su jefe máximo y fundador, Pedro Antonio Marín, más conocido por «Manuel Marulanda» y «Tirofijo». Chaves reveló que había ofrecido su territorio para que «siga avanzando el proceso» de negociación comenzado en 2005 por el Gobierno colombiano y el ELN. Se desarrolla, con menguados éxitos pero sin levantarse de la mesa, en La Habana. Después, Chávez se instaló en la embajada de su país y se entrevistó con unos 35 colombianos, entre ellos abogados de presos que apoyan el acuerdo humanitario, y nueve destacados empresarios. El Gobierno de Venezuela entregó al de Colombia a 41 indultados de los 118 paramilitares de ese país vecino sorprendidos cuando en 2004 se entrenaban para ejecutar un plan para intentar derrocar y matar al presidente del país, Hugo Chávez. Del indulto quedó excluido un número no precisado de paramilitares acusados de haber asesinado a uno de sus compañeros, cuyo cuerpo fue hallado enterrado en la finca próxima a Caracas donde se entrenaban. Del total de arrestados, un número no precisado de menores de edad fueron repatriados poco después de que el plan fuera abortado, en tanto que en octubre de 2005 un tribunal militar sentenció a penas de entre dos y nueve años de cárcel a los otros, junto a dos oficiales activos venezolanos y al general retirado Ovidio Poggioli, señalados como autores intelectuales del plan. En un acto en un destacamento militar del estado del Táchira, fronterizo con Colombia, los ministros venezolanos del Interior, Pedro Carreño, y de Defensa, general Gustavo Rangel, hicieron la entrega formal de esas 41 personas a la cónsul colombiana en la zona, Luz Yáñez, y a funcionarios de la Cruz Roja y de la policía colombiana. Previamente, Carreño entregó a cada uno de los liberados copia del decreto presidencial de indulto y sus documentos personales, en tanto que Rangel subrayó en un discurso que el acto formaba parte de los esfuerzos de Chávez por lograr un canje de presos y secuestrados de la guerrilla de Colombia, para lo cual viajó ayer, viernes, a Bogotá como primer paso de los contactos.