Acusa a su estamento militar de apoyar actividades terroristas y fomentar programas nucleares
EE.UU. aumenta la presión contra Irán con nuevas sanciones económicas
Son las más severas que ha impuesto Washington desde la crisis de los rehenes
Estados Unidos aumentó ayer la presión sobre Teherán al anunciar nuevas sanciones económicas contra su estamento militar, y especialmente la Guardia Revolucionaria, la organización más cercana al presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad. La secretaria de Estado, Condoleezza Rice, y el secretario del Tesoro, Henry Paulson, anunciaron ayer en Washington las sanciones contra el Ministerio de Defensa iraní, la Guardia Revolucionaria, la fuerza Quds y empresas y entidades financieras relacionadas con estos grupos. Rice afirmó que «muchas de las políticas más desestabilizadoras del régimen iraní son llevadas a cabo por estas dos agencias, la Guardia Revolucionaria (GR) y la fuerza Quds, una organización de GR». La secretaria de Estado añadió que la Guardia Revolucionaria está facilitando la proliferación de armamento mientras que la fuerza Quds está apoyando actividades terroristas en el Oriente Medio y Afganistán. Las sanciones -las más severas impuestas por Washington desde la crisis de los rehenes estadounidenses en 1979- afectarán a más de 20 entidades e impedirán que realicen transacciones a través del sistema financiero estadounidense. La decisión también supone la congelación de cualquier activo que estas entidades posean en Estados Unidos. Las medidas contra el estamento militar iraní afectan a tres bancos de propiedad estatal: Melli, Mellat y Saderat. Rice vinculó este último con la financiación de actividades terroristas. También afirmó que la sanciones están diseñadas para «enfrentarse al comportamiento amenazante de los iraníes» y Paulson dijo que para poner freno a las actividades iraníes. «La capacidad del régimen iraní para desarrollar programas nucleares y de misiles balísticos, desafiando las resoluciones del Consejo de Seguridad, depende de su acceso a sistemas internacionales de comercio y financiación», afirmó Paulson. El secretario del Tesoro cifró en «centenares de millones de dólares» los fondos que Irán canaliza cada año para financiar «actividades terroristas». «Irán también envía a terroristas centenares de millones de dólares cada año a través del sistema financiero internacional. Los bancos iraníes ayudan utilizando una serie de prácticas financieras engañosas con la intención de evadir los controles más rigurosos». Paulson solicitó a la comunidad internacional a que siga los pasos de EE.UU.. El pasado 25 de septiembre la Cámara de Representantes de EE.UU. aprobó endurecer las sanciones contra Irán, en señal de repudio al presidente iraní, Ahmadineyad.