España no apoyará un Kosovo libre salvo que sea bajo la tutela de la UE Se prepara una misión civil para asumir el control

El jefe del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, dijo que, en caso de declaración unilateral de independencia de Kosovo, tendrá una posición «contundente», y avanzó que la decisión de su Ejecutivo con el futuro de este enclave dependerá del procedimiento fijado y del diálogo entre las partes. Zapatero se refirió al futuro de Kosovo en la rueda de prensa que ofreció al término del Consejo Europeo de Bruselas que analizó la situación en esa zona de los Balcanes y la actitud que ante ella debe tener la UE. El jefe del Ejecutivo destacó que la Unión Europea quiere mantener una posición común en este asunto y que España considera que el objetivo prioritario debe ser garantizar la paz y la estabilidad en la zona. También subrayó que el Gobierno de España es «más partidario de unir que de dividir» y que, con el caso de Kosovo, se está ante una situación «muy excepcional». Zapatero dijo que el Gobierno español tiene sus reservas ante lo que se deduce jurídicamente de la resolución de la ONU de 1999 en relación con Kosovo y sobre la base que sustentaría una posible actuación unilateral de independencia. «Si se produce, el Gobierno español tomará una posición muy clara y contundente al respecto», aseveró antes de pedir que no se adelanten acontecimientos y señalar que, en caso de una declaración unilateral, España tomará sus decisiones en función de su propia convicción y siempre tratando de hacer la mayor aportación constructiva. Una decisión que precisó que «dependerá muchísimo del procedimiento y del diálogo que se establezca entre las partes». Al pedirle si compartía las palabras del presidente francés, Nicolas Sarkozy, de que el proceso hacia la independencia de Kosovo es inevitable, dijo que respetaba ese vaticinio y que hay que tener una cierta expectativa sobre la evolución de los acontecimientos. «No es descartable en absoluto, es probable la circunstancia a la que se refiere el presidente Sarkozy», añadió. Preguntado por la posibilidad de que España reconociera la independencia de Kosovo si así se acordara, explicó que el consenso es el deseo de todos los socios comunitarios, y, por ello, se van a dar los pasos de forma concertada y siempre con respeto a las decisiones de cada país. Insistió en que el consenso debe tener como finalidad esencial garantizar la paz y la estabilidad, y la mejor garantía para ello es la «máxima unidad de acción» por parte de la UE y el diálogo con todas las partes. Zapatero se refirió al acuerdo del Consejo Europeo por el que se ha decidido enviar una misión civil institucional y policial para relevar en el futuro a la que mantiene la ONU en Kosovo desde 1999, y dijo que España ya tiene en la zona a 600 efectivos. Ante la eventualidad de que España pueda hacer más aportaciones, señaló que cuando los ministros de Exteriores de los Veintisiete establezcan las fórmulas, los efectivos y los medios, su Gobierno adoptará una posición. Pero hizo hincapié en que «España siempre está comprometida para arrimar el hombro a favor de la paz y estabilidad institucional». Zapatero aludió también en la rueda de prensa al trabajo del Consejo Europeo en materia de inmigración y se mostró satisfecho La Los jefes de Estado y de Gobierno aprobaron iniciar «de inmediato» los preparativos para una misión civil en Kosovo que asuma la administración judicial y policial de esa provincia serbia de mayoría albanesa. Se dio el mandato al Alto Representante de Política Exterior y de Seguridad Común, Javier Solana, de que prepare esta misión junto a las autoridades kosovares y de las Naciones Unidas. Sin embargo, aún se desconoce la fecha en la que la UE relevará a la Onu en la mayoría de las tareas que asumió en 1999, cuando se hizo cargo de la provincia tras los bombardeos de la OTAN que expulsaron al Ejército serbio. Los detalles de la misión deberán aprobarse en un próximo Consejo de Asuntos Generales, pero en anteriores reuniones se ha venido hablando de un despliegue de 1.500 efectivos.