Egipto y Hamás cierran el paso fronterizo al sur de la franja de Gaza
Las fuerzas egipcias y Hamás cerraron ayer por la mañana la frontera entre la franja de Gaza y Egipto, doce días después de que fuera abierta con explosivos por el grupo islámico para romper un bloqueo israelí que asfixia a este territorio palestino. El domingo, barreras metálicas y alambradas fueron usadas para cerrar todas las brechas abiertas en este cierre fronterizo y decenas de milicianos del movimiento Hamás, que controla la franja desde junio, usaban porras de madera para obligar a retroceder a todo aquel que intentara entrar en Egipto. Los islamistas llegaron a disparar al aire para alejar a los palestinos que lanzaban piedras en dirección de los policías egipcios, apostados al otro lado. Sólo quedó abierto un solo pasillo por el que regresaban a Gaza caminando los palestinos que habían salido al país vecino y por el que transitaban los egipcios que regresaban a su país desde Rafah. Abierta con explosivos La frontera había sido forzada el 23 de enero con explosivos con el fin de poner fin de alguna forma al violento bloqueo israelí de alimentos, medicamentos o gasolina que sufre este territorio, paupérrimo, superpoblado y aislado del resto del mundo en el que se hacinan 1,5 millones de personas. En aquel momento, miles de palestinos cruzaron a Egipto para comprar comida y otros bienes de primera necesidad, protagonizando escenas de desesperación que dieron la vuelta al mundo. El paso fronterizo quedó cerrado después de que Hamás y Egipto llegaran a un acuerdo tras dos días de conversaciones en El Cairo.