El abogado Marcos Aragao Correia, que busca con un equipo de buzos el cuerpo de Madeleine McCann en el fondo de un lago, dijo hoy a EFE que está convencido de que los restos están allí pero admitió que será muy difícil hallarlos. El letrado portugués intenta desde hace meses encontrar por su cuenta a la niña británica y cree que hay un 99 por ciento de posibilidades de que esté muerta y su cuerpo fuera arrojado a la represa de Arade, a unos 40 kilómetros del apartamento de Praia da Luz. Pero Aragao Correia reconoce que las posibilidades de encontrar esos restos
debido a la existencia de corrientes en el embalse y a que las aguas son muy turbias. Todas las pistas que posee, explica, apuntan a que el cuerpo de la niña debe estar en el embalse y ante la dificultad de la búsqueda ha concentrado su tarea en las zonas donde hay más probabilidades de que pueda aparecer. Durante las inmersiones realizadas en las últimas horas, explicó, que se ha encontrado una piedra atada con varios nudos a una cuerda, que podría haber sido utilizada para hundir el cadáver de la niña. El letrado indicó que durante estas búsquedas,que se mantendrán hasta el viernes, se encontraron otros trozos de cuerda así como
y de un tejido usado en el norte de Europa que podría pertenecer a la pequeña. El abogado portugués, que decidió iniciar esta búsqueda después de recibir
sobre el caso tres días después de la desaparición de Madeleine, el 3 de mayo de 2007, aseguró que los indicios que él tiene coinciden con los de la agencia española de detectives Metodo 3, contratada por los padres de la menor. Aragao Correia se reunió con miembros de esta agencia de detectives y les entregó los hallazgos del embalse para analizarlas. El reloj Rolex de «Raúl Reyes», el fallecido «número dos» de la guerrilla de las FARC, quedará bajo custodia del Banco de la República de Colombia (emisor), dijeron en Bogotá fuentes gubernamentales. El destino del reloj fue confirmado en Bogotá por el titular , Carlos Albornoz, cuya dependencia es la responsable de la recepción, manejo y venta de bienes muebles e inmuebles decomisados por tener origen ilegal. Albornoz explicó a la prensa local que «el reloj se guarda en una cajilla de seguridad en el Banco de la República hasta tanto se decrete su extinción (de dominio o confiscación plena)».Lo aconsejable con «un bien de estos tan especial» es «dejarlo ahí a buen cuidado de la entidad bancaria» hasta que los jueces legalicen su confiscación, consideró el funcionario, aunque aclaró que la DNE puede ponerlo en venta antes de una decisión judicial. «De hecho, los bienes perecederos muebles hay que venderlos, porque no podemos permitir que en manos del Estado esos bienes pierdan valor», apuntó Albornoz.