Clinton recurre a sus ahorros

La aspirante demócrata a la Casa Blanca Hillary Clinton prestó a su campaña presidencial más de 6,4 millones de dólares (4,1 millones de euros) en el último mes, informó un ayudante de su oficina electoral. En concreto, Clinton recurrió a sus ahorros el pasado 11 de abril, cuando destinó 5 millones de dólares (3,2 millones de euros) a su campaña, y el 1 de mayo, con una nueva aportación de un millón de dólares (640.000 euros), y después de esta fecha prestó otros 425.000 dólares (275.000 euros). La senadora por Nueva York ya había invertido en febrero de su propio bolsillo 5 millones de dólares (3,2 millones de euros), lo que eleva el préstamo total aportado por la precandidata demócrata a 11,4 millones de dólares (7,3 millones de euros). La campaña de Clinton ha tenido dificultades para recaudar la misma cantidad de fondos que su rival en la carrera demócrata por la Presidencia de Estados Unidos, Barack Obama. De acuerdo con los últimos documentos registrados en la Comisión Federal Electoral, Clinton comenzó el mes de abril con casi 32 millones de dólares (20 millones de euros) en efectivo, pero sólo podía gastar 9 millones (5,8 millones de euros) de este importe durante las primarias, según la cadena CNN. Los registros indican, asimismo, que Clinton adeudaba más de 10 millones de dólares (6,4 millones de euros), lo que significa que la aspirante demócrata estuvo en «números rojos» incluso antes de anunciar con fuerza su candidatura mediante anuncios de televisión previo a las primarias de Pensilvania a finales de abril. Después de su victoria en ese estado, la campaña de Clinton recaudó 10 millones de dólares (6,4 millones de euros) a través de Internet. Su campaña no reveló cuánto ha logrado recaudar desde su victoria, aunque por estrecho margen, en Indiana y su derrota en Carolina del Norte el martes. Frente a los problemas de fondos que aquejan a la campaña de Clinton, su contrincante Obama no ha sufrido para atraer suficientes contribuyentes para su candidatura. De hecho, desembolsó más de 7 millones de dólares (4,5 millones de euros) para anuncios dirigidos a los votantes de Carolina del Norte e Indiana, mientras que Clinton solamente gastó, o pudo gastar, 4 millones (2,5 millones de euros).