En todo el arco parlamentario la sensación es de que «se está ocultando algo»
Los diputados de IU y de ICV en el Congreso han acusado al Gobierno de transmitir la impresión de «tener algo que ocultar» sobre los aviones auspiciados por la CIA que supuestamente sobrevolaron suelo español. Así se han manifestado el coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, y el diputado de ICV, Joan Herrera, quienes además han anunciado la presentación de una serie de medidas y de preguntas en el Congreso para instar al Gobierno a que facilite toda la información que posea al respecto. IU, que ya la pasada semana presentó en el registro una solicitud de comparecencia del director del CNI, Alberto Saiz, ha denunciado hoy por medio de un escrito que el Ejecutivo sólo ha respondido 13 de sus 48 preguntas al respecto, y sin aportar ningún dato concreto, y que no ha recibido aún el informe interministerial que pidió la legislatura anterior. Asimismo, en conferencia de prensa, ha criticado al Gobierno por no favorecer ninguna comparecencia, salvo la del ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, quien, según ha apuntado Llamazares, recibió «una patata caliente», ya que, a su juicio, el Departamento responsable es principalmente el de Defensa. Portugal lo desvela ICV, por su parte, ha dado a conocer a los periodistas un informe del Parlamento portugués logrado por el eurodiputado ecosocialista Raul Romeva. En el texto, según ha señalado, queda constatado que los vuelos de la CIA atravesaron suelo español a pesar de las negaciones al respecto del Gobierno. Joan Herrera, además, ha registrado un grupo de preguntas en las que inquiere por qué el Gobierno español no reconoce lo que sí ha hecho el Ejecutivo portugués acerca del tráfico de vuelos de la CIA por España. También pide aclarar si existía autorización para que se llevaran a cabo y exige conocer la información que el Ejecutivo tiene en su poder, así como si está dispuesto a entregarla al Congreso. «El Gobierno se resiste al reconocimiento de los vuelos», ha dicho Llamazares, para quien no cabe ninguna duda de que se produjeron con la «pasividad» de los servicios de inteligencia y de los Estados europeos.