Acusan al presidente de Colombia, Uribe, de estar detrás del complot
Detienen a cuatro sospechosos deplanear un atentado contra Correa
La trama implicaba a un general retirado ecuatoriano y del que sólo se sabe un apellido, Aguas
La Policía Judicial de Ecuador detuvo a tres ciudadanos colombianos y un ecuatoriano sospechosos de preparar »un atentado contra el presidente, Rafael Correa«, informó la Fiscalía ecuatoriana. Los detenidos son los ciudadanos colombianos Oscar Peña, Oscar Jiménez y Edgar Gonzáles y el ecuatoriano Santos Camacho. Los cuatro detenidos, uno de los cuales dijo pertenecer al grupo paramilitar colombiano de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), según informó el fiscal Patricio Navarrete, se encuentran en las dependencias de la Policía Judicial en Quito. A los detenidos se les ocuparon abundantes fotografías del Palacio Presidencial y un croquis de la zona de la Plaza de la Independencia. Por su parte, el Fiscal General, Washington Pesántez, sólo dijo a los periodistas que habían sido detenidos extranjeros que habrían estado planificando un »atentado contra la seguridad del Estado«. La Presidencia de Ecuador no ha ofrecido hasta el momento ninguna información ni emitido algún comentario sobre el caso. El pasado lunes, la página de Internet de la Agencia Bolivariana de Prensa (ABP) difundió un comunicado del guerrillero de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) »Iván Márquez« en el que acusaba al presidente de Colombia, Álvaro Uribe, de tratar de asesinar a Correa y al gobernante de Venezuela, Hugo Chávez. Un general retirado La nota indicaba que el servicio de inteligencia del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS) de Colombia preparaba »varios grupos de sicarios que enviará a Ecuador para asesinar también a Correa«, en coordinación con un general retirado ecuatoriano de apellido Aguas». El general retirado del Ejército ecuatoriano Luis Aguas Narváez, ex comandante general del Ejército, el único general con ese apellido de las Fuerzas Amadas Ecuatorianas, negó cualquier relación con el supuesto plan de asesinato. Además, «Márquez» aseguró que, con el propósito de matar a Chávez, Uribe «infiltró» en Venezuela a más de 100 paramilitares por medio del servicio de inteligencia del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS). El texto enviado por Márquez afirmaba asimismo que son falsos los ordenadores confiscados en el campamento que tenía en Ecuador el abatido número dos de las FARC, «Raúl Reyes», y acusa al Gobierno colombiano de utilizar esa historia para «fustigar» y «amenazar» a los países vecinos.