El Ejército libanés devuelve la paz a Trípoli tras los combates que causaron diez muertos
El Ejército y la Policía libaneses, que reforzaron ayer sus posiciones en la ciudad de Trípoli, han logrado restaurar la calma después de dos días de combates que causaron 10 muertos y 54 herido. «Ocho de las víctimas murieron debido a los enfrentamientos y dos de paro cardiaco», explicó un alto cargo policial libanés que pidió en anonimato. Soldados y agentes, apoyados por tanques, se desplegaron ayer en los barrios conflictos de Bab el Tabane, de mayoría suní, y Yabal Mohsen, de mayoría alauí, donde se registran choques de forma intermitente desde hace dos meses. El jefe de la Policía libanesa, el general Achraf Rifi, declaró a medios locales que sus unidades y el ejército lograron imponer un plan de seguridad destinado a poner fin a la violencia. El sábado, el Ejército había advertido en un comunicado de que las tropas «emplearán la fuerza si fuese necesario para proteger a los civiles, sus propiedades e impedir la presencia de elementos armados» en las calles. Los enfrentamientos no sólo provocaron víctimas civiles, sino que también destruyeron propiedades.