Podrá declararse culpable o inocente de los once cargos que tiene, entre ellos el de genocidio
Karadzic comparecerá hoy ante el Tribunal tras ser trasladado a La Haya
Está acusado por crímenes de guerra tras la matanza de Srebrenica y por el asedio de Sarajevo Me
El traslado ayer de Radovan Karadzic al Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (Tpiy) dará la oportunidad a la Fiscalía de procesar a un ex alto cargo serbobosnio por el genocidio en Srebrenica, después de no haber podido condenar al ex presidente yugoslavo Slobodan Milosevic. La causa comenzará hoy mismo con la primera comparecencia de Karadzic ante los jueces del Tpiy, en la que la opinión pública volverá a ver al antiguo líder serbobosnio despojado de la barba y las grandes gafas en las que se refugiaba bajo la identidad del médico naturista Dragan Dabic. El juicio a Karadzic tiene muchas similitudes con el proceso a Milosevic, fallecido en su celda del Tpiy en extrañas circunstancias en 2006, tanto por la naturaleza de los cargos como por las personalidades y responsabilidades de mando de los acusados. Cuando Milosevic falleció de un infarto -hay teorías que aseguran que fue un suicidio- muchos expertos criticaron la falta de eficiencia de la Fiscalía, entonces encabezada por Carla del Ponte, a la hora de presentar su caso, que se prolongó años. El sucesor de Del Ponte, Serge Brammertz, hizo hincapié ayer en rueda de prensa en la intención de la Fiscalía de conducir su causa «con la mayor eficacia», reconociendo que debe aprenderse de los fallos del pasado. El fiscal del Tpiy adelantó que pretende enmendar el acta de acusación para, entre otras cosas, introducir «hechos ya establecidos por la corte e incluir las pruebas recogidas durante los últimos ocho años». También adelantó que su equipo intentará que los magistrados acepten en la fase preliminar al proceso judicial algunas pruebas y, así, reducir las necesarias durante el juicio en sí mismo. En la fase preliminar, que se puede decir que arrancará hoy con la primera comparecencia de Karadzic, las partes se ponen de acuerdo en fechas, números de testigos y tiempo disponible para el fiscal. En su primera comparecencia, Karadzic tendrá la oportunidad de declararse culpable o inocente de los once cargos de los que se le acusa y entre los que destaca el de genocidio por la muerte de casi 8.000 musulmanes varones, incluidos niños, en Srebrenica en 1995, aunque realmente dispone de treinta días para responder. El ex líder político serbobosnio, de 63 años, está acusado de crímenes de guerra tanto en relación a esta matanza como al asedio Sarajevo, en el que también fallecieron miles de personas. Se le inculpa, además, de crímenes de guerra por utilizar a 284 soldados de las fuerzas de la ONU como escudos humanos, cuando el Ejército serbobosnio temía la intervención de la Otan contra sus posiciones. Sin atreverse a augurar cuánto durará el juicio, Brammertz remarcó ayer que el proceso contra Karadzic es «complicado», entre otros aspectos porque «hay que probar la relación entre los cargos y la capacidad de mando del individuo». Los fiscales no tendrán que probar, sin embargo, que en Srebrenica hubo genocidio, lo cual ya fue aceptado primero en la sentencia en apelación al general serbobosnio Radislav Kristic.