El futuro de las guerras en Irak y Afganistán
Está ya claro que George Bush dejará pendiente a su sucesor, sea el demócrata Barack Obama o el republicano John McCain, el futuro de las guerras en Irak y Afganistán. A dos meses y medio de que expire el año -y con él, el mandato de la ONU que legaliza la presencia de las tropas estadounidenses en Irak-, Bush aún no ha logrado resolver aún las negociaciones con el Gobierno en Bagdad sobre el futuro de esa fuerza, en la actualidad de 140.000 efectivos. También están pendientes las conversaciones de paz en Oriente Medio, donde el año pasado se comprometió a lograr un acuerdo para antes del final de su mandato Las perspectivas para ello son más que complicadas, en especial desde que el primer ministro israelí, Ehud Olmert, dimitiera en un escándalo de corrupción. Ello ha estancado aún más unas conversaciones de paz que este año ya habían logrado de por sí mínimos progresos. Tampoco parece probable que logre la aprobación en el Congreso de los tratados de libre comercio pendientes con Colombia, Panamá y Corea del Sur. En cambio sí ha conseguido uno de sus principales objetivos, la entrada en vigor del acuerdo de cooperación nuclear civil con India, suscrito finalmente el pasado viernes tras un proceso que se prolongó tres años. Pero la pieza clave de legislación para los próximos cien días ya está firmada desde esta semana: la orden ejecutiva que crea el equipo de transición para facilitar la llegada del próximo presidente.