Royal busca apoyos para dirigir el partido socialista

La ex candidata presidencial Ségolène Royal se esforzaba ayer en obtener apoyos a su candidatura para dirigir el Partido Socialista, durante un congreso en Reims que amenaza con desgarrar a la izquierda francesa. Dieciocho meses después de su derrota ante el conservador Nicolas Sarkozy en la elección presidencial, Royal, de 55 años, anunció el viernes por la noche su candidatura al puesto de secretario general del Partido Socialista, que la colocaría en órbita para las elecciones presidenciales de 2012. Pero su anuncio desató inmediatamente una ronda de complicadas negociaciones entre sus adversarios, que estudian la ecuación posible para sacar adelante una mayoría común. Los otros tres competidores son el alcalde de París, Bertrand Delanoe, la alcaldesa de Lille, Martine Aubry, y Benoît Hamon. Cada uno de ellos encabezó su propio proyecto de renovación del partido, que en la votación de los militantes el pasado 6 de noviembre quedaron por detrás del presentado por Royal, el más votado con un 29%. De esos cuatro proyectos presentados al congreso de Reims debe surgir una moción mayoritaria que dará el perfil para el futuro jefe del partido. Finalmente, los militantes designarán al primer secretario del Partido Socialista en un votación que tendrá lugar el próximo 20 de noviembre. Más allá de la designación del sucesor de François Hollande, ex pareja de Ségolène Royal y desde hace once años primer secretario del PS, lo que está en juego es la presidencial de 2012, pues en general el jefe del partido aparece como el candidato natural en esta elección. En las negociaciones de este sábado entre los enemigos de Royal, la solución se anunciaba peliaguda. Los partidarios de Delanoe reclaman el liderazgo de la coalición anti Royal, pero los partidarios de Aubry y de Hamon se niegan a ello. «Aquellos y aquellas que tengan matices, tienen que comprometerse», insistió Delanoe ayer en un discurso, refiriéndose a las reticencias de Aubry.