El presidente de EE.UU. pronuncia un discurso en el Parlamento turco
Obama asegura que «EE.UU. no está en guerra con el islam»
La nueva relación que ofrece tiene como fin el acercamiento basado en el mutuo respeto
ankara
Estados Unidos «no está en guerra con el islam»: éste es el claro mensaje de conciliación que el presidente de EE.UU., Barack Obama, envió ayer al mundo musulmán a través de su discurso pronunciado en el Parlamento turco.
Obama estaba en Ankara en la jornada inicial de una visita de dos días a Turquía, su primera como presidente a un país de mayoría islámica, que tiene como objetivo no sólo recuperar los lazos con un aliado estratégico sino también tender puentes al mundo musulmán.
El presidente estadounidense, que desde su llegada a la Casa Blanca ha asegurado que pretende abrir una nueva etapa en las relaciones con esa región, quiso reiterar muy claramente ese mensaje. «EE.UU. no está en guerra con el islam. De hecho, nuestra alianza con el mundo musulmán es crítica para neutralizar una ideología marginal que la gente de todas las creencias rechaza», afirmó Obama, en alusión a los grupos terroristas islámicos.
El presidente estadounidense, que repetirá su mensaje en un encuentro con jóvenes hoy en Estambul, aseguró que la nueva relación que ofrece busca «un amplio acercamiento basado en un mutuo respeto y en nuestros intereses compartidos».
«Escucharemos cuidadosamente, resolveremos malentendidos y buscaremos terreno común. Seremos respetuosos, aunque no estemos de acuerdo. Y transmitiremos nuestra profunda apreciación por la fe musulmana», subrayó el presidente estadounidense, que recordó que él mismo ha vivido en un país de mayoría islámica, Indonesia.
Su mensaje no se limitó al mundo musulmán en general. El presidente estadounidense pasó revista a algunos temas pendientes de resolución, incluido el conflicto palestino-israelí.