La guerrilla tamil deja las armas cercada por el ejército ceilanés

Los Tigres tamiles renunciaron a seguir enfrentándose a la ofensiva militar del ejército de Sri Lanka y «decidieron silenciar» las armas y dejar de luchar contra el ejército gubernamental en su minúsculo reducto en el noreste de la isla, reconociendo así su derrota tras 37 años de insurrección, según afirmaba un comunicado publicado ayer domingo en la página Internet pro-rebelde Tamilnet. En estos 37 años, el conflicto armado dejó más de 70.000 muertos. La ONU considera que 6.500 civiles murieron en el noreste sólo entre fines de enero y mediados de abril.

«Esta batalla ha alcanzado su amargo final», dijo en el comunicado el responsable de las relaciones internacionales de los Tigres de Liberación del Eelam Tamil (LTTE), Selvarasa Pathmanathan. «Nos queda una sola opción, privar al enemigo de una última excusa para matar a nuestra gente. Hemos decidido silenciar nuestras armas. Lo único que lamentamos son las vidas perdidas y que no pudiéramos aguantar más tiempo», agregó el portavoz de la organización separatista.

Rehenes rescatados

Poco antes, las fuerzas armadas cingalesas habían asegurado haber «rescatado» a la totalidad de los «50.000 civiles rehenes» de los insurgentes. El presidente, Mahinda Rajapakse, había prometido el sábado que sus tropas habrían acabado con la rebelión ayer domingo. Los Tigres habían estado luchando para fundar un Estado tamil independiente en el norte y el este de la isla desde la década de los setenta. Hace tan sólo dos años, todavía controlaban un territorio de 15.000 kilómetros cuadrados. «Nos ponemos de pie voluntariamente con valentía y silenciamos nuestras armas. No tenemos otra opción que la de seguir rogando a la comunidad internacional que salve nuestro pueblo», añadió Pathmanathan ayer. «En realidad, fueron derrotados hace tiempo, pero sólo han aceptado formalmente su derrota ahora», afirmó, por su parte, el portavoz del ejército, Udaya Nanayakkara. «Pelearon por un Eelam que no podían haber conseguido nunca.

Ha sido solamente una pérdida de vidas. Han causado muerte y destrucción masiva durante años», afirmó el portavoz. «Finalmente reconocieron ellos mismos que esto se ha acabado», dijo.