El Parlamento islandés aprueba la solicitud para ingresar en la UE
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, destaca que «Islandia es un país europeo con largas y profundas raíces democráticas»
El Parlamento islandés (Althingi) aprobó ayer por mayoría absoluta autorizar al Gobierno de este país nórdico a solicitar el ingreso en la Unión Europea (UE).
La moción -”presentada por el Gobierno que forman en coalición desde hace dos meses el Partido Socialdemócrata y el Movimiento de Izquierda Verde-” contó con el apoyo de 33 de los 63 escaños del Althingi y con 28 votos en contra, así como dos abstenciones.
La primera ministra islandesa, la socialdemócrata Jóhanna Sigurdardóttir, afirmó hace unos días que su intención es presentar la solicitud de ingreso en la UE en la reunión de titulares de Asuntos Exteriores de la Unión Europea del próximo día 27.
Un hipotético acuerdo entre Reikiavik y la UE deberá ser refrendado posteriormente por los islandeses en una consulta popular para poder entrar en vigor.
Para sacar adelante la propuesta, el Gobierno necesitó los votos de cuatro diputados de la oposición, ya que cinco de los catorce parlamentarios «verdes» se manifestaron en contra de la moción, que respaldaron los veinte diputados socialdemócratas.
La votación culmina un debate que se ha prolongado durante seis días y en el que han salido a relucir las diferencias en el seno de la coalición gobernante, ya que, mientras los socialdemócratas defienden abiertamente la adhesión, los «verdes» se oponen, aunque habían aceptado inicialmente iniciar las conversaciones.
La oposición había solicitado convocar dos referendos, uno para decidir si se iniciaban las conversaciones con Bruselas y otro para aprobar un hipotético acuerdo, pero esa moción fue rechazada ayer por el Parlamento.
Solicitar el ingreso en la UE ha sido la principal prioridad de Sigurdardóttir desde que asumió el cargo el pasado mayo, después de que la izquierda obtuvo una victoria histórica en las elecciones anticipadas por la crisis, que provocó el pasado octubre la quiebra del sector bancario y su entera nacionalización.
Por otra parte, el presidente de la Comisión Europea (CE), José Manuel Durao Barroso, opinó ayer que la decisión del Parlamento islandés de pedir la entrada en la UE es un «signo de la vitalidad del proyecto europeo». Barroso destaca que «Islandia es un país europeo con largas y profundas raíces democráticas» y hace hincapié en que la isla mantiene ya relaciones «muy estrechas» con la Unión Europea.