Berlín moviliza tanques y 300 soldados para combatir a los talibanes
El ministro de Defensa alemán, Franz-Josef Jung y el máximo oficial del Ejército germano, general Wolfgang Schneiderhan, confirmaron ayer en Berlín que tropas alemanes apoyadas por tanques y aviones de combate iniciaron el fin de semana pasado, una gran ofensiva militar en la región de Kunduz en la que también participan tropas afganas. Unos 300 soldados germanos y varios tanques del tipo Marder participan en la ofensiva destinada a expulsar a los talibanes de la zona.
Según las autoridades germanas, el primer gran operativo militar en el que participan tropas alemanes, está dirigido por oficiales del Ejército afgano y tiene como objetivo garantizar que las elecciones presidenciales puedan llevarse a cabo en la región. Pero la participación del Ejército alemán en la zona puso fin a un tabú que rodeó la misión militar germana desde que fue desplegada en Afganistán gracias a un mandato del Parlamento germano, que precisó que la misión tenía como fin garantizar la paz en el país y ayudar a la reconstrucción. Desde entonces, el Gobierno germano se amparó en ese mandato para negarse a enviar soldados a combatir a otras regiones de Afganistán. «La meta del Ejército alemán es garantizar la seguridad para reconstruir el país», asegura.