INCLUIDO CHRISTIÁN POVEDA
31 periodistas han muerto en el mundo en lo que va de año
Somalia y Pakistán, los países con el mayor número de asesinados
Un total de 31 periodistas han muerto en el mundo en lo que va de año, incluido el fotógrafo franco-español Christián Poveda, asesinado a tiros ayer en San Salvador, según los datos de la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF).
La Sociedad Interamericana de la Prensa (SIP) ha declarado que en 2009 han sido asesinados dos periodistas en México, y uno en Honduras, Guatemala y Venezuela.
ORTEGA, EN HAITÍ
El último reportero español muerto violentamente en el ejercicio de su profesión fue Ricardo Ortega, corresponsal de Antena 3 Televisión, que murió el 7 de octubre de 2004 en Puerto Príncipe (Haití) tras recibir dos disparos de presuntos partidarios del ex presidente Jean-Bertrand Aristide, cuando cubría una manifestación de opositores al exgobernante.
Los países con mayor número de periodistas muertos este año son Somalia, con seis muertos, y Pakistán, con cinco. Siguen Irak y Rusia, con tres; y Sri Lanka, los territorios palestinos y Filipinas, con dos. Un miembro de la prensa ha muerto en Afganistán, India, Irán, Kenia, Madagascar, México y Venezuela.
2006 Y 2007, LOS AÑOS MÁS SANGRIENTOS
En el 2008 murieron 60 periodistas en el mundo. Entre otros, 15 de ellos en Irak; 7 en Pakistán; 6 en Filipinas; 4 en Georgia; 4 en México; 3 en la India y 3 en Tailandia.
Reporteros Sin Fronteras califica el 2006 y el 2007 como los períodos más sangrientos para la prensa mundial de los ultimos quince años.
Durante el año 2007 murieron 87 periodistas: 47 en Irak, 8 en Somalia y 6 en Pakistán. En el 2006 perdieron la vida violentamente 85 profesionales de la prensa: 41 en Irak, 9 en México y 6 en Filipinas.
Los datos recogidos por la SIP prueban que en los ultimos 15 años han sido asesinados 338 profesionales de la prensa en Latinoamérica, y 11 más siguen desaparecidos. Lideran la estadística Colombia (121 muertos), México (71 asesinados y 9 desaparecidos) y Brasil (31 muertos y un desaparecido).