LA ACUSACIÓN PEDÍA 40 LATIGAZOS
Liberada la periodista sudanesa condenada por llevar pantalones tras pagar la multa de 145 euros
La Unión de Periodistas de Sudán paga la sanción de Lubna Ahmed Husein
Lubna Ahmed Husein, la periodista sudanesa condenada ayer por indecencia por vestir pantalones ha sido puesta en libertad esta mañana después de que finalmente una asociación pagara la multa impuesta por el tribunal y que asciende a 500 libras sudanesas --casi 145 euros--.
La Unión de Perioditas de Sudán ha pagado la sanción. Tras conocer la sentencia, Husein anunció que se negaba a pagar la multa, por lo que aceptaba la pena de cárcel de un mes, sentencia muy distinta a la de 40 latigazos que pedía la acusación. Sin embargo, Mohieddin Titawi, presidente de la organización, ha revelado que este colectivo ha pagado la multa, aunque no ha explicado por qué.
"Vinieron a mí en la prisión hace unos minutos y me dijeron que me tengo que ir. No tengo ni idea de por qué. Les he dicho a todos mis amigos y a mi familia que no pagaran la multa. Pero he sido liberada", ha declarado Husein a la agencia Reuters.
INSATISFECHA
No obstante, la periodista ha manifestado que no está del todo contenta "porque hay todavía más de 700 mujeres en la cárcel que no tiene a nadie que pague por ellas". Muchos periodistas afirman que el colectivo presidido por Titawi tiene vínculos con el Gobierno.
Lubna Husein, que fue detenida el pasado julio en una fiesta junto con otras 12 mujeres, se enfrentaba a una pena de 40 latigazos por vestir prendas consideradas indecentes por las autoridades. Diez de las otras mujeres se declararon culpables y fueron azotadas, según ha dicho la propia Husein.
CAMPAÑA EN LOS MEDIOS
Experiodista que trabajaba para Naciones Unidas cuando fue arrestada, Husein ha dado publicidad a su caso, posando ante los medios de comunicación vestida con pantalones amplios.
En su opinión, los pantalones que llevaba el día que la detuvieron, que también llevó a su primera comparecencia ante el tribunal que la ha juzgado, son respetables y, por lo tanto, no infringió la ley al ponérselos.