La huelga finaliza hoy tras diez días sin que nadie negocie con los trabajadores

Medianoche. En ese momento la huelga llegará hoy a su fin tras diez jornadas de paro de los trabajadores del sistema provincial de recepción y tratamiento de residuos y prácticamente 9.000 toneladas acumuladas en el CTR sin reciclar.

El segundo paro de la plantilla de la UTE Legio VII en el plazo de un mes y sin ningún atisbo de negociación. Ayer mismo fracasó el intento de la Oficina Territorial de Trabajo para reunir a las partes (empresa, trabajadores y Gersul) en busca de un acuerdo, tras recibir la petición para auspiciar este encuentro por parte del comité de huelga.

«La falta de interés por reunirse y negociar nada del consorcio y la UTE nos obligó a no insistir más, a pesar de que Trabajo estaba dispuesta a enviar las notificaciones para citarles oficialmente», explicó ayer el responsable provincial de USO, Antonio Nicolás.

Gersul ha insistido una y otra vez en no negociar con los trabajadores hasta que no depusieran su actitud y desconvocaran el paro, mientras la empresa no ha dado ni un paso para tratar de llegar a un acuerdo después de que antes de que se iniciara la huelga fracasaran las reuniones mediadas por el Serla.

Entre tanto, la huelga afrontó ayer su penúltima jornada con un gran movimiento de camiones de recogida de ayuntamientos deseosos de librarse de su carga para comenzar de nuevo el servicio de limpieza.

Sin embargo, esta tarea fue muy complicada teniendo en cuenta la desigual distribución de camiones con destino al CTR para las plantas de León y Ponferrada. Así, en la capital a lo largo de la jornada sólo pudieron descargar ocho camiones (todos de la ciudad), cuando la cola, iniciada la noche del miércoles, llegó a rozar la veintena de vehículos de León, su alfoz, Sahagún y otras poblaciones que también llevan aquí su basura.

Finalmente pudo descargarse en esta planta alrededor de 80 toneladas, de las casi 1.500 que tendrían que haber entrado, con la acumulación de la recogida desde que el lunes se suspendieron los servicios mínimos.

Por su parte, en el CTR, cuyo acceso estuvo toda la jornada vigilado por la Guardia Civil entraron 14 contenedores con veinte toneladas cada uno, trasladados por siete camiones en dos viajes. Los piquetes impidieron la entrada de tres camiones recolectores de la zona de La Bañeza al no estar incluidos en los servicios mínimos que se dieron la vuelta sin plantear ningún problema.