Desayuno con resaca

Cuatro días después y aún colea el desayuno que el pasado lunes mantuvieron los alcaldes de León y San Andrés con los medios de comunicación para anunciar que servicios como el transporte o bomberos se prestarán de forma conjunta para ahorrar costes y mejorar la calidad de los mismos. Sin embargo, los concejales del PP, UPL y PAL-UL se mostraron ayer incrédulos y al mismo tiempo desconfiados de que dichos acuerdos se plasmen en el papel y, más aún, que lleguen a realidad.

Esta desconfianza se tradujo en más de una decena de preguntas realizadas a la alcaldesa Mª Eugenia Gancedo, aunque no todas tuvieron respuesta. Ahí van algunos ejemplos: Cuánto costarán al Ayuntamiento de San Andrés dichos servicios, de dónde sacará el dinero dada la situación de las arcas municipales, que dirá Alsa respecto al autobús intraurbano... Claro que, puestos a desconfiar, lo hacen más del uno que de la otra. «No es la primera vez que la capital nos trae en jaque», dijo el concejal del PAL-UL.

El caso es que habrá que esperar a los trámites administrativos que serán los que marquen las características de los acuerdos. «Negociaremos para que sean lo más rentable posible para nuestros ciudadanos», insistía la regidora.

Pero, además de los bomberos y el transporte, Gersul también tuvo su parte de protagonismo en el Pleno. Tras las declaraciones de la UPL sobre la deuda que este consistorio tiene con el consorcio y las críticas que vertió el concejal del PAL-UL, el edil responsable de Hacienda pidió que, antes de acusar a nadie, la oposición se cerciore de datos como que sí se han pagado las tasas por los edificios públicos, el apremio de Gersul llegó el 25 de enero, y no en diciembre como dijo la UPL, y que está en presupuesto este año el dinero necesario para hacer frente a las cuotas de Gersul. «Sólo hay que estudiarlo», dijo.