España encabeza el ránking mundial de dispositivos de identificación electrónica
La mitad de las empresas utiliza la firma digital, el doble que la media en la Unión Europea
España es el país con más dispositivos de identificación electrónica en este momento en todo el mundo. Actualmente están en funcionamiento más de 2,5 millones de certificados de firmas electrónicas, y más de 14 millones de documentos de identidad electrónicos, a los que se suman otros seis millones cada año.
Además, el 49% de las empresas del país utilizan ya de manera habitual la firma electrónica, un porcentaje que duplica la media de la Unión Europea, y que coloca a España en el segundo puesto del ránking europeo en este tipo de identificación.
Y disponer de mecanismos para garantizar una identificación digital segura es la base que permitirá que los avances en nuevas tecnologías desarrollen todo su potencial. «Sólo así podremos pasar de servicios de carácter genérico a otros más personalizados, que tengan valor contractual, que son los que realmente mejorarán la calidad de vida de los ciudadanos».
Así lo aseguró ayer Francisco Ros, secretario de Estado de de Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información, durante la inauguración de la conferencia de la Unión Europea sobre Confianza en la Sociedad de la Información, que se celebra en el Auditorio de la capital dentro de los actos de la Presidencia española de la UE. La conferencia concluye hoy con la presentación de las Conclusiones de la Conferencia de León, que servirán de base para que antes de junio se presenten las líneas de actuación de la Agenda Digital de la UE.
Durante la inauguración Ros recalcó la necesidad de avanzar en la seguridad y la confianza de las nuevas tecnologías, pero también de hacerlo de manera compatible con los derechos fundamentales a la privacidad y a la protección de datos. «Un reto que no es pequeño».
De ahí la importancia de disponer «de mecanismos para una identificación electrónica segura, que permitirá un desarrollo adecudo de la sociedad de la información».
El secretario de Estado destacó durante la inauguración de la conferencia, a la que asisten expertos del ámbito empresarial, científico, administrativo y político de los países de la UE, que la idenficiación electrónica tiene la doble ventaja de que permite mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, a los que ahorra tiempo y trámites, y también de una reducción de los costes. «Y pone a disposición de las empresas la posibilidad de desarrollar toda una serie de productos y contenidos basados en la seguridad que genera esta identificación».
Actualmente España cuenta con 25 millones de internautas habituales, una de las cifras de penetración más altas de la UE, aunque se centra sobre todo en los jóvenes. Mejorar la penetración en la población más madura es uno de los retos del Gobierno español, a través de programas como el Avanza, que desde el 2005 ha invertido ya 6.500 millones de euros.
Ros insistió en lo vertiginoso del cambio que generan las nuevas tecnologías, y en la transformación tanto social como económica que están produciendo. «Educar en el uso responsable de estas tecnologías es una obligación que debemos afrontar cuanto antes», concluyó.