El Protocolo Laboral de la nueva caja avanza y puede ultimarse el viernes
Los sindicatos analizan hoy el documento que detalla el resultado de las negociaciones, y la mesa se reúne a partir de mañana de nuevo en Madrid
La mesa que negocia el Protocolo Laboral volverá a reunirse mañana jueves por la tarde, y a lo largo
Las negociaciones avanzan y el tiempo apremia. La reunión ayer de la mesa que negocia el Protocolo Laboral para la fusión de Caja España y Caja Duero logró acercar posturas, después de dos semanas de contactos bilaterales. Faltan «matices» y rematar los asuntos más conflictivos del recorte de plantilla y las condiciones de los empleados que se queden, sobre todo de los que se van, pero sindicatos y entidades ven ya cercana la posibilidad del acuerdo.
Tanto que hoy los sindicatos recibirán el documento detallado con los avances y las propuestas planteados ayer en la mesa, y ambas partes volverán a reunirse a partir de la tarde de mañana jueves, y durante la jornada del viernes. Fuentes sindicales señalaron ayer que las líneas generales de lo que será el Protocolo Laboral pueden quedar cerradas esta semana.
Un acuerdo necesario porque el avance del proceso de fusión está condicionado a un acuerdo en materia laboral, pero el plazo para solicitar las ayudas al Fondo para la Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) no es eterno.
Las plataformas sindicales (una formada por UGT, la otra por CC.OO., CSICA y UEA) llevaron ayer por la mañana a la mesa dos plataformas con las condiciones propuestas para negociar. A última hora de la tarde, las cajas hicieron una propuesta verbal que hoy será concretada a los sindicatos. Entre medias, un acercamiento de posturas que ha sido valorado positivamente por ambas partes.
En las tres patas en las que se basa la negociación se han producido avances. Respecto a la movilidad geográfica, la parte que había quedado más matizada en las negociaciones anteriores, están pendientes de concretar las medidas de conciliación que se pongan en marcha en los casos de traslados forzosos, que serán en forma de permisos y compensaciones económicas.
Salarios de referencia. Por lo que se refiere a la equiparación de las condiciones de las dos plantillas, se ha establecido una lista de salarios de referencia para cada categoría laboral, y la negociación se centra ahora en «ajustar» el límite que tendrán esos sueldos. Quienes cobren ahora menos que lo que se establezca tendrán un periodo de adaptación, que seguramente coincidirá con el que esté en aplicación el FROB para reordenar la nueva entidad. En cuanto a los que cobren actualmente más de lo que se pacte, seguirán percibiendo el sobrante, pero en concepto de complementos personales.
De llegar a un acuerdo en este punto sobre el modelo planteado, alrededor de un 70% de la plantilla (más de 3.000 personas) quedarían en situación de equilibrio en cuanto a las percepciones económicas.
Más complicado está el acuerdo en lo que se refiere a las prejubilaciones. Sindicatos y cajas negocian sobre la posibilidad de establecer un modelo en el que los empleados que se acojan a este sistema cobren entre un 80 y un 90% de su salario actual, dependiendo de la fórmula por la que opten para seguir aportando dinero a su fondo de pensiones (que actualmente pagan las cajas).