Reportaje | s. c. anuncibay
León crea escuela
El Plan de Éxito Escolar para el primer curso de secundaria cuenta con 18 centros inscritos en la provincia. El refuerzo en primaria anota otros cuatro colegios
El instituto leonés Lancia cuenta con un Plan de Éxito Escolar propio que ya ha sido reconocido por
La Junta tiene su Plan de Éxito Escolar, el mismo para todos los centros de la comunidad, con profesores voluntarios que impulsan a los alumnos hacia la promoción. Un programa que arrimó desde el principio muchas críticas. Los sindicatos exigían desdobles, refuerzos en horarios lectivos y una plantilla docente más amplia. Las reivindicaciones continúan vigentes, pero las lanzas verbales ya no apuntan a este programa de la consejería, al menos con la misma fuerza.
Muchas de esas reclamas sindicales encuentran asiento en el instituto leonés Lancia, que ha hecho suyas las pautas dadas en la lucha contra el fracaso escolar y cuenta con su propio plan, sostenido por la administración, que anota el reconocimiento del departamento que dirige el consejero Juan José Mateos. Este centro, que tiene 450 estudiantes matriculados, ofrece a sus alumnos las mismas clases de apoyo impartidas por la Junta. Pero las da con sus propios profesores, «que están en contacto permanente con los que imparten las clases por la mañana y así conocen las necesidades de cada alumno», celebra Secundino Llorente, director de este centro de secundaria. El claustro del instituto realizó a principio de curso, «en el mes de octubre», una evaluación inicial para «ver qué apoyo precisan», explica. Después, reunieron a los estudiantes susceptibles de entrar en el programa de refuerzo y a sus padres. «Lo más importante de todo es la implicación de las familias», reconoce Llorente.
Los tutores de estos jóvenes deben firmar un documento que obliga al compromiso. «Sus hijos deben asistir a las clases todos los días, hacer los trabajos y cumplir los objetivos», relata el director del centro, que cuenta este curso con «70 alumnos» apuntados al refuerzo educativo. Las clases comenzaron en la primera evaluación y se imparten los miércoles y jueves en «horario especial», para que todos puedan acudir. Hay una hora de Ciencias, una más de Inglés y otra de Sociales. Lengua y Matemáticas cuentan con dos horas cada una.
«Los grupos son muy reducidos de 8 ó 9 alumnos y el objetivo es que todos aprueben. Hay que erradicar el fracaso escolar», asume Secundino Llorente.