El ciclón corta el tráfico ferroviario en León y siembra las carreteras de obstáculos
La borrasca llega con menor intensidad de la anunciada y marca rachas entre 85 y 110 kilómetros por hora
«Xynthia» llegó ayer a León con menos intensidad de la anunciada por los meteorólogos. Perdió fuerza en su camino hacia el norte de la Península, aunque a pesar de ello en la montaña de la provincia las ráfagas de viento alcanzaron los 110 kilómetros por hora, mientras que en el resto la velocidad llegó en el momento más álgido de la ciclogénesis, a las 19.30 horas, a los 85, según datos del Observatorio Meteorológico de La Virgen del Camino. Este centro, incluso, ya ha medido este año -"el 14 de enero-" viento de mayor fuerza que el que ha traído esta bomba meteorológica: 105 kilómetros por hora.
La lluvia que cayó prácticamente durante toda la jornada y las precipitaciones de nieve contribuyeron aún más a agravar la situación en las carreteras y en los ríos ya desbordados y sus riberas.
La alarma generada por los posibles efectos de este fenómeno, llamado también la tormenta perfecta, provocó que el tráfico ferroviario quedara interrumpido en León a partir de las 18.00 horas. Renfe prevé reestablecer la circulación de sus trenes hoy a las 2.00. Ocho horas sin actividad decidida por el Adif siguiendo el protocolo de seguridad ante vientos fuertes. Los viajeros fueron trasladados por carreteras en autobuses. Una suspensión que afectó a todos los trenes del norte del país.
Feve También optó por la tarde por interrumpir su tráfico en la línea León-Bilbao, siguiendo el mismo protocolo y facilitando a todos sus viajeros alternativa de transporte.
Árboles arrancados de cuajo por la fuerza del viento huracanado, vallas de obras, paneles publicitarios, semáforos, farolas, cornisas, postes telefónicos o de luz arrastrados también por el ciclón fueron los efectos más patentes de la ciclogénesis durante todo el día en la provincia.
Una situación que provocó cientos de llamadas desde León a Emergencias del 112, que dieron como resultado 79 avisos de este servicio a la provincia principalmente por la presencia de obstáculos en las carreteras y mobiliario urbano volando, en el caso de las poblaciones.
La nieve obligó a lo largo del día a utilizar cadenas en media docena de puertos de montaña, aunque al cierre de esta edición ya no eran necesarias, salvo en el caso de San Isidro cerrado a última hora. La lluvia también mantiene cortada la vía de la red principal que da entrada a San Glorio por presencia de balsas de agua en Boca de Huérgano, además de la carretera que une Villaobispo de Otero con Pandorado. Presentan problemas, igualmente, por el mismo motivo las conexiones entre La Bañeza y Alija del Infantado, la zona de Castrotierra, el municipio de Puebla de Lillo, las áreas de las comarcas de Babia y Luna, el Órbigo y el Páramo.