Entra en vigor el decreto que garantiza el consumo de carbón autóctono
Anllares, La Robla y Compostila, entre las diez centrales térmicas que participan en el proceso de restricciones por garantía de suministro como unidades vendedoras
Las centrales, después las empresas y luego Hunosa llevan almacenando casi un año.
La publicación del Real Decreto por el que se establece el procedimiento de resolución de restricciones por garantía de suministro para garantizar la utilización de carbón nacional abre el proceso que permitirá desarrollar los procedimientos operativos del sistema eléctrico y el desarrollo paralelo de los sistemas informáticos para llevarlo a cabo. La norma que regula el incentivo para la compra de carbón autóctono por parte de las térmicas fue aprobada en Consejo de Ministros el pasado día 12 de febrero, y se publicó el viernes en el Boletín Oficial del Estado. Mientras se pone en marcha efectivamente el procedimiento (pendiente también de la aprobación de la Comisión Europea) el carbón de las minas leonesas seguirá almacenándose en la empresa pública Hunosa.
El derecro establece también las diez centrales térmicas que participan en el proceso de resolución de restricciones por garantía de suministro como unidades vendedoras, entre ellas las tres leonesas: Anllares, La Robla y Compostilla.
La reglamentación aprobada en el BOE recuerda que el Gobierno puede establecer los procedimientos, compatibles con el mercado de libre competencia en producción, para conseguir que las térmicas utilicen fuentes energéticas autóctonas hasta un límite del 15% de la demanda nacional de energía.
«La garantía de suministro a los consumidores eléctricos pone de manifiesto la importancia de mantener abierta la opción de los combustibles de origen autóctono», señala; para añadir que la generación a través de térmicas que utilizan carbón como combustible permite «un grado de fiabilidad adecuado para garantizar la correcta operación del sistema y el suministro eléctrico, al tratarse de una producción gestionable».
El decreto establece que la cantidad de mineral que se consuma no podrá ser superior a la establecida en el Plan del Carbón 2006-2012.
El sistema de restricciones por garantía de suministro consiste en realizar sobre un programa diario base de funcionamiento las modificaciones necesarias para cumplir los objetivos de consumo de carbón autóctono con seguridad del suministro y el menor impacto económico y medioambiental posible. De hecho, la utilización del carbón saca del sistema las centrales más contaminantes, que cobrarán por el lucro cesante.