El farmacéutico, proveedor de medicamentos de calidad
El documento de la Organización Mundial de la Salud (OMS) del año 1998 denominado «El papel del farmacéutico en el autocuidado y la automedicación» entiende por automedicación el uso de los medicamentos por los individuos para tratar síntomas o enfermedades autoidentificables, «Será automedicación responsable cuando las personas tratan sus dolencias y afecciones con el uso de medicamentos autorizados, disponibles sin necesidad de prescripción y que son seguros y eficaces si se los emplea según las indicaciones».
La OMS establece el papel del farmacéutico en el autocuidado y la automedicación como proveedor de medicamentos de calidad, como educador y supervisor, como colaborador y como comunicador. Dentro de este último epígrafe se establece que «el farmacéutico debería ser capaz de ayudar al paciente a elegir la automedicación apropiada y responsable o, cuando sea necesario, remitir al paciente al médico para que le aconseje».
Uno de los objetivos es proteger es indicar al paciente la opción más adecuada para resolver su problema de salud y en su caso, seleccionar un medicamento o medidas no farmacológicas, así como proteger al paciente frente a la posible aparición de resultados negativos de la medicación.