Las ayudas a las familias perpetúan a la mujer al cuidado de los dependientes

Mujer (83% de los casos), casada, con estudios primarios, sin ocupación remunerada y en el 40% de los casos hija del afectado que en un 77,2% realiza un cuidado permanente. Este es el perfil de la persona cuidadora de los familiares dependientes que dibuja el último informe de la Fundación La Caixa, que advierte de las carencias del sistema actual de atención a la dependencia. Según las conclusiones del estudio, las mujeres cargan con el peso de la dependencia en Castilla y León. Los datos del informe reflejan la situación social de la mitad de la población, que hoy 8 de marzo celebra el Día Internacional de las Mujeres.

El informe refleja que en los últimos veinte años, la edad media de las mujeres cuidadoras de personas dependientes ha subido hasta los 55 años y que la presación de los servicios sociales destinados a las personas mayores dependientes es insuficiente. También destaca, que más de la mitad de los familiares de personas dependientes adopta como salario las ayudas económicas derivadas de la Ley de Dependencia, perpetuando el papel de la familia y de la mujer como cuidadora, en detrimento de la prestación profesional, que es más cara. Los mayores suponen un 22,5% de la población leonesa, y una tercera parte de estas personas necesitan ayuda constante para desenvolverse en sus actividades corrientes de la vida diaria.

Servicios sociales. Pese a este panorama, Castilla y León es la comunidad que más servicios residenciales tiene disponibles de toda España, con el 6,80% de las personas mayores de 56 años atendidas, pero es una de las seis con menor tasa de escolarización de niños y niñas de 0 a 2 años, con un 12,5%, frente al País Vasco que tiene una cobertura del 50%. El estudio refleja que los hombres concentran su colaboración en el cuidado de los menores, aún así todavía representan el 5% de las excedencias laborales por maternidad/paternidad.

«Cuando las mujeres no disponen del apoyo de las redes familiares, y se lo pueden permitir, la opción más común es contratar a una cuidadora», dice el informe. Predominan en este sector las mujeres inmigratnes extracomunitarias, en condiciones laborales precarias.