La coalición de Mass y Cíviqus abre la puerta a Otero y De Francisco
La coalición de expulsados del PP berciano y el PSOE de Villaquilambre apela a la «honestidad y el servicio público» como valores para asentarse a nivel provincial
De derecha a izquierda, Escuredo, Hidalgo, López Placer, Mitadiel y militantes de Civiqus.
El hueco cada vez más grande que crea el descontento con PP y PSOE sumó ayer un nuevo aspirante. Una coalición que nace de los expulsados de los dos partidos mayoritarios: el Movimiento Alternativo Social (Mass), nacido de la escisión de los populares bercianos acaudillados por Ángel Escuredo y Fátima López Placer, y el Cíviqus, la aventura que emprendió Miguel Hidalgo en Villaquilambre tras su expulsión del seno socialista. «Juntos somos más»: un lema con el que pretenden convertirse en «el tercer partido de la provincia, el referente de esta tierra», unidos por «un denominador común: ser gente trabajadora, honesta y que hace política a ras de suelo».
La coalición, preparada para las elecciones municipales y autonómicas del próximo año, «tendrá representación en todas las cabeceras de comarca», para lo cual Civiqus ya ha «ampliado horizontes en Onzonilla, en Sariegos (con el partido Sariegos Despierta), en San Andrés del Rabanedo o en Vega de Infanzones», citó Hidalgo, quien reseñó que ya cuentan con «39 candidaturas», aunque sin dar nombres. «No tenemos ismos, pero caben los leonesistas; ya contamos con muchos que se encuentran a gusto», apuntó el líder de Civiqus, quien reconoció que han «hablado con Joaquín Otero y con muchos más». «Aquí estamos los que tenemos que estar y hemos querido estar. Abrimos la puerta para quien quiera entrar, sin dogmas ni vedetismos», aclaró. «Tenemos la puerta abierta sí, pero no para cualquier cosa: el que venga tendrá que acomodarse a lo dicho: la honestidad y el servicio a los ciudadanos», abundó Escuredo.
Sin concretar, Hidalgo habló y se calló al tiempo. «Los que no están, ni están ni se les espera... hoy», resolvió, antes de admitir que también han hablado con José María Rodríguez de Francisco. «No le cierro la puerta, pero es pasado», señaló.
En verano «estarán los estatutos» y luego las candidaturas. Hidalgo se pone «a disposición del partido» para ser el candidato en León; un aspirante que debe «garantizar un par de concejales» y así sumar para lograr «un diputado».