El Banco de España exige definir la fusión la próxima semana

El Banco de España no está dispuesto, una vez más, a consentir más retrasos en la definición del proceso de fusión entre Caja España y Caja Duero. Pese a las más que severas advertencias de la autoridad económica a la entidad con sede en Salamanca, el consejo de administración en el que debía dar el sí o no definitivo a la fusión el martes se convirtió de nuevo en un sí condicionado. O sea, en un quizá.

Caja Duero ha convocado de nuevo su consejo el próximo lunes, y las dudas siguen sin despejarse. Puede haber acuerdo en una de las condiciones impuesta: la de conocer el primer nivel del equipo directivo (debatir la figura del presidente no parece que vaya a contribuir a avanzar). Pero parece difícil zanjar el pacto laboral, como exige la caja salmantina.

De momento, la consultora Deloitte, encargada de la selección de personal, ha propuesto una lista de nombres para ocupar los cargos directivos del resto de los niveles. Por parte de Caja España se encuentran, además de Javier Ajenjo, director general adjunto, José Enrique Fernández Llamazares (director de Inversiones), Óscar Fernández Huerga (director Comercial), Carlos Antolín (director de Recursos Humanos), Agustín Lomba (director de Planificación y Control), Luis Miguel Antolín (Secretaría general), José Antonio Fernández (Financiero) y Francisco José Paramio (Medios).

Por parte de Caja Duero la consultora ha seleccionado a José María de la Vega (División de desarrollo corporativo. Dirección General Adjunta), Antonio Sánchez Puerto (Obra Social), María José Rivera (Comunicación y Relaciones Institucionales), Jesús Llorente (Planificación y Control. Subdirector general), Antonio Sánchez Díaz (División de Inversiones y Participadas. Dirección general Adjunta), Arturo Jiménez (Secretaría de Planificación Estratégica) y Javier Santos (Seguros).

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