Biomar busca terapias en el fondo del mar

«Buscamos en el fondo del mar». Con esta sencilla frase resume el consejero delegado del Instituto Biomar, Antonio Fernández, la actividad de la empresa de León para buscar nuevas terapias en contra del cáncer y las infecciones. Las expediciones se trasladan a diversas partes del mundo. Este año está previsto viajar a Madagascar, en la que los buzos profesionales recogen las muestras que luego servirán para investigar en el laboratorio de la empresa de León. «Desde que se recoge la muestra, que se congela, hasta que llega al laboratorio no puede pasar más de mes y medio», afirma Fernández, aunque los que más trámites y tiempo consume son los permisos de los países. «Buscamos microorganismos que nos sirvan para avanzar en nuevas terapias».

En Biomar trabajan cuarenta personas, 34 en labores de investigación y administración, entre los que se encuentran farmacéuticos, biólogos, químicos y auxiliares de laboratorio.

Pese a que llevan catorce años de actividad empresarial, no fue hasta finales del 2007 cuando se lanzaron a la investigación de proyectos propios. Biomar tiene actualmente siete compuestos desarrollados en proceso de investigación preclínica en animales, para cuyo desarrollo mantienen colaboraciones con distintas universidades y con empresas especializadas.

Entre los proyectos más inmediatos es reforzar las líneas de investigación abiertas en terapias contra el cáncer y las enfermedades infecciosas y ampliar las colaboraciones con otras empresas del sector. Además del cáncer y las infecciones, Biomar trabaja con otras empresas en el desarrollo de fármacos para las enfermedades neurodegenerativas, como el alzhéimer, desarrollo de antiinflamatorios, «tenemos un compuesto seleccionado para una enfermedad autoinmune de médula ósea, que se llama injerto contra huesped, y algunas colaboraciones en tuberculosis con una empresa de Barcelona».

Las aplicaciones industriales del biodiesel, en alimentación y agricultura son parte de la estrategia de la empresa.