Diario de León

Crónica | miguel ángel zamora

Todo por un ajuste de cuentas

Las víctimas y los agresores formaban parte de dos clanes de una misma familia, enfrentada por el tráfico de drogas

Dos agentes de la Guardia Civil de León, el día en que ocurrió el homicidio.

Dos agentes de la Guardia Civil de León, el día en que ocurrió el homicidio.

Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

Dos clanes de una misma familia de mercheros extremeños se enzarzaron en una reyerta a tiros en la mañana del 8 de noviembre del 2008 en Villaobispo. Un ajuste de cuentas por temas relacionados con el tráfico de drogas andaba entre bastidores.

La población de Moraleja (Cáceres), donde los protagonistas eran conocidos por su largo historial delictivo, ya sabía de sus andanzas. El primer grupo había venido siguiendo al segundo desde Extremadura, donde el fallecido ya se había esquivado la muerte milagrosamente tras resultar herido de un balazo. Ingresado en un hospital, pidió el alta voluntaria y desapareció, sabedor de que si lo localizaban, su vida corría peligro. No cayó en la cuenta de que habían instalado un GPS de última generación oculto en su coche, con el que pudieron seguir todos sus movimientos.

Localizados en Villaobispo, donde residían en un piso de alquiler cercano a la carretera de Santander, la mañana de autos los dos grupos se encontraron frente a frente pero no llegaron a identificarse. Las víctimas abrieron fuego primero, pensando que se trataba de una operación de la Guardia Civil. Los agresores fueron más certeros y acabaron con la vida del fallecido.

Uno de los supuestos participantes en la reyerta fue detenido y se encuentra encarcelado en la Prisión Provincial de León. El resto, fueron cayendo en operaciones paulatinas de la Guardia Civil. Los dos que presuntamente faltaban, ya han caído.

tracking