Villaquilambre suspende las ayudas a la natalidad como medida de ahorro
El Ayuntamiento asegura que es una decisión provisional, no definitiva, para aliviar las arcas este año y garantiza que se abonarán los 600 euros pendientes por hijo
El Ayuntamiento de Villaquilambre ha decidido suspender provisionalmente las ayudas a la natalidad que ha concedido en los últimos seis años. La concejala de Hacienda, Milagros Gordaliza, reconoció «que no es una noticia que nos guste dar, pero la situación económica es la que es y nos vemos obligados a recortar esas ayudas, que suponen más de 300.000 euros».
No obstante, si los esfuerzos por ahorrar y ajustar el presupuesto permiten cerrar este ejercicio con superávit, el equipo de Gobierno se planteará proseguir con esas subvenciones y reanudarlas cuando los ingresos del municipio vuelvan a equilibrarse, «ya que es una de las medidas más eficaces para fomentar el empadronamiento», admite.
Los programas electorales de los partidos que forman el equipo de gobierno de Villaquilambre, UPL, PSOE y PP, coincidían en impulsar las ayudas a la natalidad. De hecho, al comienzo de la legislatura, en junio del 2007, el tripartito decidió ampliar la cuantía a 600 euros por hijos nacidos desde el 1 de enero del 2006, lo que provocó una avalancha de 490 solicitudes.
El requisito que se exigía es que los progenitores o padres adoptivos estuvieran empadronados en Villaquilambre con una antigüedad mínima de ocho meses y que al bebé también se le inscribiera en el censo. Además, la prestación era compatible con otras ayudas para la misma finalidad que pudieran conceder las Administraciones públicas y como ventajas añadidas figuraban la prioridad absoluta en las guarderías, en los cursos y las actividades municipales, y la gratuidad o los precios especiales para las mismas.
Pagos retroactivos. El Ayuntamiento ya abonó 275 ayudas a la natalidad, que han supuesto un desembolso global de 165.000 euros. Las subvenciones que se han otorgado son las correspondientes a los nacidos en el 2006 y primeros meses del 2007, dado que la convocatoria se realizó con carácter retroactivo. También está tramitando otras doscientas peticiones.
Otro de los recortes que se adoptarán este año afecta a la Oficina de la Vivienda, que en junio se integrará en las instalaciones de Consumo, ubicadas en el edificio de los juzgados. Los programas sociales se salvan gracias a la financiación del nuevo Plan E, así como el programa de becas, la escuela de música, el plan de fomento de la lectura conocido como Lecturo.