El Regimiento de Artillería de Ferral asume la unidad de Cádiz

El Mando de Artillería de Campaña (Maca) de la base militar Conde de Gazola asumió, el pasado 1 de enero, el Regimiento de Artillería de Costa (Racta 4) con base en San Fernando (Cádiz). Así, el Maca controla no sólo los regimientos de Ferral, de Astorga y Burgos sino uno más, lo que suma un total de 1.864 artilleros, de los que casi un millar están en la base militar de Ferral.

El Racta 4 se creó el 2 de mayo de 1710 y a principios de año desapareció el Mando de Artillería de Costa y el Grupo de Localización e Identificación que se integraron en el Regimiento de Artillería de Costa número cuatro que, a su vez, depende de Maca leonés.

Al mando de los cuatro regimientos de artillería está, desde ayer, el general Arturo García-Vaquero Pradal, que sustituyó en el cargo a Tomás Rivera Moreno que pasa a la reserva. Un acto que estuvo presidido por jefe de la Fuerza Terrestre del Ejército de Tierra, el teniente general Virgilio Sañudo.

Primero tuvo lugar la imposición de la faja de general al nuevo responsable de los artilleros y después la parada militar, que tuvo lugar en el Patio de Armas de la base, en la que el general saliente le entregó el mando a Arturo García-Vaquero.

Nada más tomar posesión de su cargo aseguró que la llegada al Maca «colma mis ilusiones» porque «es la unidad de artillería más importante del Ejército de Tierra». Una labor que realizará con «fuerza y entusiasmo» y en la que tendrá dos prioridades: las misiones y las personas. Respecto al primer aspecto, García-Vaquero pidió el «esfuerzo» de los artilleros para cumplir en las misiones internacionales. En cuanto a la segunda prioridad dejó claro que «el equipo es lo importante».

«Os pediré esfuerzo para mejorar y trabajo a cada uno en lo que os corresponda para ser mejores soldados y artilleros», destacó. En cuanto a los próximos retos, el general jefe del Maca hizo hincapié en el esfuerzo que supondrá rentabilizar los nuevos materiales de gran sofisticación que llegan al regimiento tales como el Obús 155-52, un radar contrabatería o un moderno sistema de localización de sonido.

Arturo García-Vaquero mostró su disposición a colaborar en todo lo posible con León, una ciudad a la que definió como «con solera y moderna».

Elogios. Por su parte, el jefe de la Fuerza Terrestre del Ejército de Tierra elogió el trabajo bien hecho del general saliente y las virtudes de su sucesor en el cargo del que destacó sus «capacidades». El nuevo jefe del Maca nació en 1956 en Durango (País Vasco), está casado y tiene tres hijos. De tradición militar ha sido jefe del Grupo de Artillería de Campaña Paracaidista de Alcalá de Henares o del Regimiento número 11 de Burgos. En cuanto a las misiones internacionales en las que ha participado destacan Bosnia, Afganistán, la antigua Yugoslavia y el Kurdistan Iraquí.

Según los datos facilitados ayer, el Mando de Artillería de Campaña dirige a un total de 1.864 artilleros de los que 112 están en el Cuartel General y 824 en el regimiento número 63 (ambos en la base militar Conde de Gazola); otros 528 pertenecen al Regimiento Lanzahohetes de Astorga; 400 más tienen su sede en Burgos; y otros tantos pertenecen al regimiento de Cádiz.

Al acto asistieron numerosas autoridades civiles y militares, entre ellas, el delegado del Gobierno en Castilla y León, Miguel Alejo, la alcaldesa de San Andrés o el concejal de Seguridad de León, José Antonio Díez. Mª Eugenia Gancedo, entre otros.