La Junta no aclara cuántas hectáreas permiten cobrar la PAC lejos de León
El plazo para tramitar las ayudas se amplía otros quince días para facilitar la gestión a miles de agricultores leoneses atrapados por el retraso en los cultivos
A los potentados beneficiarios de la PAC de fuera de la provincia de León les quedan aún 18 días más para tratar de lograr alguna de las hectáreas de monte que se rifan para activar derechos de ayudas desvinculados de cualquier tipo de producción. La peregrinación a esta provincia es uno de los hechos más notables que se aprecian en la campaña de tramitación de las ayudas, ahora con dos semanas más de plazo, decidido para enjugar los problemas que tienen esta primavera los profesionales del sector; los que, al contrario que los cazaprimas de otras provincias que buscan en León un salvoconducto para ingresar las subvenciones, trabajan la tierra y aún no han podido ajustar e iniciar cultivos después de un invierno infernal, seis meses de lluvia y nieve y la recolección de la cosecha anterior aún pendiente.
La Junta no ha querido aclarar el número de hectáreas improductivas de esta provincia que se han registrado como argucia para activar derechos de cobro de la PAC para beneficiarios de fuera de este territorio. Beneficiarios cuyos ingresos por vía de los incentivos que proceden de Bruselas superan en algunos casos los 60.000 y los 70.000 euros anuales. Este tipo de gestión fue defendido con ardor por parte del secretario de Estado de Desarrollo Rural, Josep Puxeu, que reiteró que ninguno de los trámites que realiza un beneficiario de la PAC de Cáceres o de Palencia, o de Valladolid o Segovia, o de Cantabria, para activar derechos de pago único con hectáreas de monte público de la provincia leonesa está fuera de la legalidad. Al contrario, Puxeu puso como ejemplo el amparo del real decreto que elabora su ministerio para dar cobijo a ese tipo de trámites.
Mientras, los más de 13.000 beneficiarios leoneses tienen de plazo hasta el 15 de mayo para acceder a las ayudas que este año oponen a una situación que bordea la ruina.