Reportaje | s. c. anuncibay
El Crucero mira de reojo
Toda la integración depende de la variante ferroviaria
Los recortes del Ministerio de Fomento no van a afectar a las obras del AVE, al menos ese es el compromiso del titular del área en el Gobierno, José Blanco. La alta velocidad es una prioridad para el Ejecutivo, que mantiene la programación de las líneas en marcha.
La integración del ferrocarril en la ciudad, que esconderá 2,6 kilómetros de vía en León y San Andrés del Rabanedo, depende en buena parte del Enlace Sur y las obras de la estación provisional.
La terminal que construyen en la trasera de los Juzgados debe estar finalizada a finales de este año para que los trabajos de soterramiento, con los que desaparecerá el paso a nivel del Crucero, empiecen en los primeros meses del 2011.
Antes de las próximas elecciones municipales tiene que estar suprimida la barrera, pero los responsables del proyecto deben subsanar primero las incidencias que cada poco -”este año ya van tres-” registra la variante ferroviaria, pagada con 30 millones de las arcas públicas.
Los 5,5 kilómetros del tramo Onzonilla-Estación de León ya están en obras. Los movimientos de tierra son visibles y la semana pasada comenzaron los trabajos en la parte del tendido que conecta Torneros con la ciudad.
La nueva infraestructura que aparece a la altura de Onzonilla asumirá hasta el próximo 26 de noviembre el paso de tres Alvias al día y otros cinco trenes de Media Distancia, más los mercancías que la atravesaban desde su apertura.
Ahora tiene una limitación de velocidad a 60 kilómetros por hora; antes tuvo que estar cerrada durante dos meses; y después apareció una nueva restricción para la circulación que duró pocos días. Si todo sigue igual, difícilmente podrán cumplir los plazos.
