Tejido de 400 empresas y 6.000 empleos

El número de empresas que forman el tejido agroindustrial leonés -”el soporte de producción y transformación de alimentos, el reto de agotar hasta las últimas consecuencias el provecho del valor añadido en ese caudal inagotable que aporta cualquier subsector del campo leonés-” ronda ya el número de las 400. La cifra, cercana la consideración de formidable en una provincia como León donde la actividad económica mengua por momentos, se empequeñece ante las consecuencias que tiene en parámetros laborales: más de seis mil personas tienen empleo en el sector agroindustrial leonés. El número se codea en relevancia con el flujo monetario con el que se puede medir, finalmente, el valor de las empresas leonesas productoras de alimentos: más de 370 millones de euros, según los datos extraídos de los balances económicos del último año.

Esta reconversión de la economía leonesa del sector primario al transformador o al industrial tiene por delante aún un recorrido amplio, si se pone el territorio leonés frente al espejo de otros que han marcado la pauta del desarrollo social y territorial, la mejora de las rentas y el bienestar de sus ciudadanos a partir, precisamente, de producir, transformar y comercializar alimentos de calidad. Distintivo común de la mayoría de la producción alimentaria leonesa es el sello de calidad, que avalan una veintena de sellos de y marcas de garantía que aglutinan denominaciones de origen, indicaciones protegidas y asociaciones de productores que apuntalan el sector.