Un nido de cigüeña protegido deja sin luz 4 horas a cien vecinos de Sariegos
El Seprona prohíbe trasladar el «hogar» de las aves, que ha provocado tres averías en un año, y la empresa eléctrica sólo pudo cortar los palos que dañaban la línea
Un poste con varas para evitar el anidamiento.
La ternura que suelen despertar las cigüeñas se convirtió el pasado miércoles en desamor al comprobar cómo la calidad de vida de estas zancudas prima sobre el bienestar de los humanos. La pesadilla comenzó a las 9.30 horas, cuando parte de los hogares de Sariegos se quedaron sin luz por el peso y la interacción en la línea eléctrica de varios palos de un nido de estas aves situado en el centro de transformación La Bodega.
El suministro no pudo reanudarse hasta la 1.32 horas, según confirmaron fuentes de la empresa Iberdrola. La tardanza se debió a la imposibilidad de mover, romper o trasladar el nido hasta que llegaran los miembros del Seprona y autorizaran las soluciones al tratarse de una especie protegida.
Los agentes impidieron el desplazamiento de la -˜casa-™ de las zancudas, lo que habría solucionado definitivamente el problema de averías eléctricas en la zona, al comprobar que el nido tenía polluelos. Así, las alternativas de la unidad técnica de mantenimiento de Iberdrola que se desplazó hasta la zona se quedaron en cortar las ramas y palos salientes que originaron la caída de tensión y reponer el encintado de los cables que habían pelado a picotazos las cigüeñas.
La situación se había repetido en un poste contiguo y el nido fue retirado por la compañía, pero esta acción fue denunciada por los ecologistas. Ahora el poste presenta unas varas que impiden el anidamiento.
Soluciones provisionales. El alcalde de Sariegos, Juan Carlos Hidalgo, confía en que el nido se pueda llevar a otro lugar menos conflictivo en cuanto las aves emigren y recuerda que es la tercera ocasión en que los vecinos sufren cortes de luz en un año por el pico de estas aves y el peso de sus hogares, de hasta una tonelada. «Compaginar el hábitat de las cigüeñas, que son muy testarudas y vuelven a anidar en los mismos lugares, con los servicios que necesita la población es difícil, pero se necesita una solución definitiva, porque la última broma de estos pájaros, además de cortar la luz, afectó al depósito de agua, que gestionamos de forma telemática y que posee una bomba que se acciona cuando falta líquido», indicó.
Iberdrola confirmó ayer que la avería afectó a un centenar de vecinos de la zona.