Comienza el derribo de los once chalés «ilegales» junto a la N-630 en Sariegos

Los operarios han comenzado la demolición de los once chalés de Sariegos situados junto a la N-630, en las inmediaciones de La Copona. Esas viviendas habían sido incluidos hace cuatro años por la Junta en su plan regional de Actuaciones Urbanísticas Irregulares y, aunque el Ayuntamiento entendía que difícilmente podían ser ilegales, «porque se construyeron antes de 1975, cuando no existían leyes que prohibían construir en terrenos rústicos», lo cierto es que incumplían la distancia mínima de retraerse cincuenta metros lineales de la carretera. Un handicap que ha obligado a su derribo siguiendo las especificaciones marcadas por la Junta cuando aprobó el plan parcial de la zona, donde se proyecta una macro-urbanización de 86 hectáreas y 551 viviendas bautizada como el Cueto del Moro.

Ha sido, precisamente, el inicio del desarrollo del plan de urbanización, bloqueado en los últimos años, el que ha puesto en marcha los derribos para adaptarse a la normativa, sobre todo, si se acaba materializando el desdoblamiento de la nacional hasta La Robla.

El Ejecutivo autonómico había señalado en su catálogo del 2006 como «ilegales» 188 viviendas del municipio por incumplir las normas urbanísticas o medioambientales. El Ayuntamiento presentó varias alegaciones indicando que la mayoría estaban en vías de solución. El grueso, 88 chalés, correspondían al sector de La Barbada de Pobladura del Bernesga, una zona que el Consistorio aún trata de resolver con una propuesta de urbanización por cooperación que permita asfaltar, dotar de alumbrado y redes de saneamiento y agua a los propietarios. Otras 24 viviendas de Azadinos marcadas como irregulares en el documento, ya están legalizadas, al igual que las de la carretera de Caboalles. El informe realizado por la Junta reflejaba, además, que 1.124 viviendas de la provincia leonesa tenían distintos defectos urbanísticos, 8.100 en la autonomía.