Villanueva aboga por incluir el interés económico en la incompatibilidad

El vicepresidente segundo y consejero de Economía y Empleo de la Junta, Tomás Villanueva, destacó ayer que el Real Decreto Ley de reforma de la Ley de Órganos Rectores de Cajas de Ahorros (Lorca) del Gobierno, era «necesario en un momento de crisis» y valoró los contactos políticos con el PP para un actuación «muy importante», que permitirá mantener los elementos esenciales de las cajas y profundizar en su profesionalización. «Puede marcar una nueva etapa para las cajas, para poder competir con el sistema bancario tradicional», dijo.

Villanueva, que participó en un encuentro en Madrid entre consejeros de Economía y Hacienda de las autonomías gobernadas por el PP, con el coordinador económico del partido, Cristóbal Montoro, para abordar la reforma, aseguró que, desde la «prudencia» al no conocer el articulado de la nueva normativa, los cambios introducidos permiten mantener los elementos esenciales de las cajas, siempre que las entidades lo deseen, y establece un marco de incompatibilidades que permitirá su profesionalización.

1397124194 Capitalización privada. En este sentido, resaltó la posibilidad de que las cajas se puedan capitalizar a través de la iniciativa privada, algo que le parece «bien», y comentó que las entidades requieren de fondos propios, y «la actividad ordinaria ya no es suficiente». El vicepresidente económico explicó que las cajas deberán decidir si se privatizan y se convierten en un banco, si se mantienen como están o se integran en un SIP, algo «muy extendido» en estos momento. «Hay distintas modalidades», dijo.

Tomás Villanueva también se congratuló por el sistema de incompatibilidades de la reforma para evitar que cargos electos puedan formar parte de los órganos de decisión, y defendió esta medida para las personas con intereses económicos dentro de las entidades, aspectos clave para su profesionalización. Villanueva se detuvo en este último aspecto, del que sustanció que es una cuestión de «elegancia personal, de respeto por las personas y por la propia caja y de honorabilidad». «Hay que profesionalizar mucho más los equipos rectores y administradores de las cajas», dijo.