Condenan a un médico por la muerte de un paciente tras un error en la medicación
Un año de prisión y de inhabilitación por un homicidio por imprudencia grave para el facultativo y multa de 600 euros para la enfermera que le asistió por imprudencia leve, según la sentencia del juzgado de lo Penal
Fotografía de archivo de la fachada principal del Hospital de León.
El juzgado de lo Penal número 2 de León ha condenado a un año de cárcel y un año de inhabilitación al médico V.S.G., del servicio de Hematología del Hospital de León al considerarle autor de un delito de homicidio causado por imprudencia grave-"penado en el artículo 142.1 y 3 del Código Penal-" al administrar por error un medicamento a una paciente oncológica que falleció tres meses más tarde, a los 57 años de edad. La sentencia también condena a la enfermera M.G.F. a una multa de 600 euros como responsable de una falta de homicidio causado por imprudencia leve. El auto recoge el atenuante de reparación de daño para el médico. La sentencia de la jueza se produjo tras alcanzar las partes (familia de la víctima y acusados) un acuerdo de conformidad ya que el abogado de la familia pedía para el médico dos años de cárcel y tres de inhabilitación y el fiscal solicitó cuatro años de prisión y cuatro de inhabilitación. Los abogados defensores solicitaban la libre absolución. El médico no irá a la cárcel al no tener antecedentes penales. La sentencia se produce cinco años después de que ocurrieran los hechos y el médico, que lleva treinta y cinco años de ejercicio profesional, está próximo a la edad de jubilación.
La jueza fija también una indemnización para la familia de 142.000 euros (esposo de la fallecida, sus dos hijos y sus padres). Aunque la responsabilidad subsidiaria es del Sacyl, serán las aseguradoras del médico y la enfermera las que afronten la indemnización. La familia pidió al inicio del proceso una indemnización de 300.000 euros, pero no recurrirán la decisión judicial. El letrado de la familia de la fallecida defiende la buena voluntad de sus representados «para no perjudicarles gravemente en el ejercicio de su profesión». El abogado del médico no descarta pedir el indulto.
Los hechos probados. La sentencia considera hechos probados que el médico administró a la paciente por vía intratecal (en la médula ósea) una medicación denominada vincristina, que debía ser inyectada por vía venosa. El auto también recoge fue la enfermera la que entregó al médico la medicación equivocada pero advierte que el especialista no llevó a cabo una segunda comprobación «ue hubiera evitado un resultado fatal para la paciente». «Como consecuencia de los hechos», continúa la sentencia, la enferma «permaneció asintomática hasta el 20 de octubre del 2005, en que refiere diplopia binocular en todas las posiciones de la mirada. A partir del día 23 se produce un deterioro neurológico progresivo: vómitos, distensión abdominal y retención urinaria... el cuadro neurológico fue empeorando hasta fallecer el día 18 de enero del 2006»
La jefa del servicio de Hematología, María Jesús Moro, asegura que el médico se dio cuenta del error antes de terminar de inyectar todo el líquido del tratamiento por lo que suspendió la intervención, procedió a limpiar la médula de restos y comunicó el fallo a la familia y los servicios sanitarios. El gerente provincial del Sacyl, Carlos Díez Baldeón, declinó hacer ninguna valoración de la sentencia, «no comento nunca estas sentencias», afirmó.