Vestas intenta pactar con el comité el recorte de empleo para reducir actividad

La dirección de Vestas en León ha negociado en los últimos días con el comité de empresa el recorte de empleo con el que pretende afrontar la reducción de actividad, después de que la previsión de producción se haya visto reducida a un tercio para este año. La multinacional danesa, que en los últimos meses ha llevado a cabo una ampliación en sus instalaciones en el polígono de Villadangos para incrementar su capacidad productiva, ha planteado ahora a la representación social la suspensión temporal de los contratos de unos 200 de los 360 trabajadores con los que cuenta actualmente. El recorte afectará a los trabajadores de producción.

La empresa negocia con el comité que estas suspensiones se produzcan de forma rotatoria, o bien se acuerden reducciones de jornada; aunque hasta el momento no se ha presentado oficialmente un Expediente de Regulación de Empleo ante las autoridades de Trabajo.

Fuentes sindicales señalaron ayer que, pese a los intentos de pactar el recorte antes de llevarlo a la autoridad laboral, las posturas seguían «muy distanciadas» y que no era previsible un acuerdo.

Vestas ya adviertió el pasado mes de marzo que reconsideraría la inversión prevista en la ampliación de plantilla e instalaciones (el cálculo era que a estas alturas estuvieran trabajando en la empresa en Villadangos 700 personas) si el parón eólico no se solucionaba. Sin embargo, después de que la Junta de Castilla y León instara a la multinacional a mantener su compromiso con la provincia, los responsables de Vestas aseguraron que seguirían adelante con la expansión contemplada en su plan estratégico para los próximos años.

De hecho, la pasada primavera la multinacional danesa Bach inauguró sus instalaciones en Villadangos para proveer de carcasas a los motores que fabrica Vestas.