Expertos de España y Portugal ensayan con animales lo último en radiología vascular

Veinticinco expertos de toda España y Portugal ensayan en modelos animales de la Universidad de León las últimas técnicas en radiología vascular e intervencionista (RVI), una especialidad dentro de la radiología en la que los profesionales -”radiólogos e intervencionistas-” realizan procedimientos diagnósticos como la arteriografía renal, y terapéuticos, como, la embolización de un mioma uterino. Los especialistas que durante dos días participan en León en el curso de Radiología Vascular e Intervencionista en Modelos Animales, en su duodécima edición, se benefician de las instalaciones de la Facultad de Veterinaria de León, que dispone de un escáner de última generación de tres teslas, lo último en tecnología radiológica. Ensayan nuevos materiales y técnicas mínimamente invasivas, de las que luego se beneficiarán los pacientes.

El curso, patrocinado por la Sociedad Española de Radiología Vascular e Intervencionista (Servei) en colaboración con el Hospital de León y La Fundación Investigación Sanitaria, se organiza para que los especialistas adquieran destreza y habilidad manual. «Es uno de los campos con abordaje mínimamente invasivo que ha experimentado mayores avances en los últimos treinta años, ofreciendo un abanico de posibilidades terapéuticas cada vez mayor, ya sea sustituyendo o bien complementando a las técnicas quirúrgicas tradicionales», explica Óscar Balboa Arregui, especialista del servicio de Radiología Vascular e Intervencionista del Hospital de León.

Más opciones terapéuticas . Los nuevos avances permiten ampliar las posibilidades terapéuticas en los pacientes. Las unidad del Hospital de León ha duplicado en un año los procedimientos con 1.546 intervenciones en el 2009, que abarcan desde técnicas más sencillas como la arteriografía femoral diagnóstica en una embolia poplítea (en la rodilla) hasta procedimientos más complejos como la embolización y exclusión de un aneurista arterial. «Los profesionales dedicados a esta actividad han de conseguir una habilidad específica para el manejo de los diferentes materiales, tanto diagnósticos como terapéuticos, guiándose por la imagen», explica Balboa, «además de la capacidad diagnóstica ante unos hallazgos determinados debe conseguirse una formación intervencionista de cómo hacer el procedimiento, cuál es el menos invasivo y el material que hay que utilizar».

Los especialistas utilizan al cerdo, de 25 kilos, por poseer una anatomía similar a la humana. Los radiólogos practican desde el drenaje percutáneo hasta una embolización selectiva de una malformación vascular o la colocación de un stent en una estenosis arterial. Para la realización de estas técnicas utilizan materiales novedosos como guías y microcatéteres.

Esta doble colaboración ha permitido avanzar en el tratamiento de patologías animales como las fístulas congénitas.