Bayón mintió a los empleados del servicio de basura y ahora dice que no paga las nóminas

La desconfianza que mostraron el jueves los representantes sindicales ante la oferta del alcalde de Villaquilambre, Lázaro García Bayón, tenía fundamento. Cuando ayer por la mañana el delegado de personal de los trabajadores, José Magín, se presentó en las oficinas municipales con la documentación solicitada por el regidor ante la asamblea de los trabajadores para hacer efectiva una de las dos nóminas que se adeudan hasta el momento, Bayón hizo efectiva su mentira y «le comunicó que no paga», manifestaba ayer el secretario provincial de USO, Antonio Nicolás, que calificó la situación de «rocambolesca».

El sindicalista explicó que la orden del regidor «llegó por teléfono», ya que éste no se encontraba en el Ayuntamiento y subrayó la situación «dramática» en la que se encuentran los trabajadores del servicio de limpieza viaria y recogida de basuras.

García Bayón se presentó el jueves en la asamblea de trabajadores en la que se abordaba la convocatoria de huelga del servicio, que comenzará en la madrugada del 29. El alcalde de Villaquilambre señaló que, pese a no contar con respaldo jurídico, se comprometía a abonar una de las mensualidades que no han percibido los trabajadores, así como a hacer frente a la nómina de noviembre, pese a la posibilidad de que la medida le costase la inhabilitación para cargo público. Además, García Bayón anunció ante los trabajadores el inicio del trámite para rescatar el contrato.

Antes de que se conociera el cambio de postura del alcalde, Nicolás manifestaba que los trabajadores no desconvocarían la huelga indefinida «mientras no se garantice la estabilidad laboral absoluta de los 28 trabajadores y el pago de los salarios y de los seguros sociales».

Por otra parte, no se pudo determinar si el cambio de parecer del alcalde supone que el Ayuntamiento de Villaquilambre ha dado marcha atrás en su intención de rescartar el contrato. A tenor de las declaraciones que efectuaban los socios de gobierno de Bayón, no hay todavía una postura definitiva sobre la rescisión del contrato.

«Falsas expectativas». En cualquier caso, USO mantendrá el paro en la recogida de basuras mientras no se atiendan las demandas citadas. Nicolás añadió que «no vale ahora escudarse en que los socios de gobierno de García Bayón no apoyan sus medidas, porque cuando se toma una decisión de este calibre se hace con la garantía de que se ejecutará».

El responsable de USO lamentó «que se generen expectativas en los trabajadores y que éstas resulten luego falsas» y se pregunta por la modalidad contractual que tendrían si se rescatase el contrato, cuestión que trasladó en la asamblea al regidor, quien contestó «que ya se vería» la fórmula de integrar a los empleados del servicio en la plantilla municipal. «Queremos que el fantasma de la inestabilidad que apareció hace unas semanas con el anuncio de recortes desaparezca», añadió.

Sobre el rescate del contrato, si finalmente se iniciara el expediente, el secretario provincial de USO manifestó que se trata de una medida «que no llegamos a comprender», ya que resolver la concesión supondría cancelar la deuda con Seralia, requisito que solucionaría el conflicto laboral. «Sólo puedo adelantar que los servicios jurídicos de USO nos han insistido en que le facilitemos en cuanto sea posible el decreto por el que se inicia el expediente de rescate, que, en principio, íbamos a tener el lunes, y el plan de estabilidad para los trabajadores», explicó Antonio Nicolás.

El sindicalista señaló desconocer la viabilidad de romper el contracto con la concesionaria del servicio público, Seralia.

El conflicto de las basuras se inicia con el plan de saneamiento económico del Ayuntamiento de Villaquilambre, que se aprobó con los votos del tripartito el pasado verano, y que planteaba una reducción del salario de los trabajadores de un 23% o, en su caso, el recorte de la plantilla en un 24%, ante la deuda de más de 2,1 millones de euros que mantiene el consistorio con Seralia. A esto se une que los trabajadores no cobraron su nómina de octubre ni la extra que se les abonaba junto con ésta.

Las partes alcanzaron un acuerdo el 15 de octubre gracias al arbitraje del Servicio Regional de Relaciones Laborales de Castilla y León (Serla). Sin embargo, las negociaciones fracasaron en una nueva convocatoria del Serla el día 16 y USO presenta al día siguiente la convocatoria de huelga indefinida.